"La infamia terminó", declaró ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, después de que trascendiesen unas declaraciones del juez José Antonio Vázquez Taín, magistrado que instruyó la causa que llevó a Marcial Dorado a la cárcel por narcotráfico, en las que sostenía que las fotos del líder del PP gallego con Dorado tomadas a mediados de los años noventa son "intrascendentes" y que no encontró "indicios indicativos de nada" contra el ahora titular de la Xunta y alto cargo en la Consellería de Sanidade cuando se tomaron las imágenes. El juez también desveló que "hay más fotos de Dorado con políticos", pero se negó a desvelar sus nombres y su afiliación: "Me llevaré el secreto a la tumba por irrelevantes".

Feijóo, tras la publicación de las imágenes por el diario El País, defendió que las fotos "solo son una fotos, no hay nada más que eso". También insistió en que no firmó, ni adjudicó, ni contrató a las empresas de Marcial Dorado, ahora en prisión para cumplir una condena de 14 años por narcotráfico. Ayer se valió de la irrupción de Vázquez Taín en escena para apuntalar su inocencia e intentar acallar las críticas de la oposición, que ha pedido su dimisión y solicitado saber si hay contratos con "hombres pajas de Dorado": "Una vez que el juez que encarcela a Marcial Dorado habla y habla con claridad, la infamia termina". "Dije siempre que detrás de esas fotos no había nada, y que esas fotos eran eso, unas fotos, y dije que también estaba dispuesto a seguir explicando y explicar todo lo que se me plantease. De hecho el miércoles voy a comparecer en el Parlamento", remarcó. "El juez concreta que lo que yo estaba contando era verdad", reiteró.

Vázquez Taín es conocido por ser el juez del Códice Calixtino pero también como el magistrado que desde Vilagarcía de Arousa persiguió a los narcotraficantes en Galicia, incluido el propio Dorado.

El juez se encargó además de imputar a Nené Barral y su hermano, por aquel entonces vicepresidente de la Diputación de Pontevedra y presidente provincial del PP, respectivamente. En febrero de 2005, durante la última legislatura de Manuel Fraga, dirigió el Centro de Estudios Judiciales y de Seguridad Pública, organismo dependiente de la Consellería de Xustiza. Fue cesado del cargo cuando el PSdeG llegó a la Xunta.

El magistrado explicó ayer en una ronda de intervenciones en emisoras y agencias de prensa que en el registro de la casa de Marcial Dorado, en el marco de la causa que instruía (South Sea) y que permitió la incautación de 6.500 kilos de cocaína, se encontraron las fotos de Feijóo y Dorado, "eran antiguas de los años noventa", pero no las incautó y se dejaron en la casa por "irrelevantes".

También reveló en declaraciones a El Mundo que se grabaron "conversaciones (entre el líder del PP gallego y Dorado) pero no se consideraron en ningún momento delictivas, ni siquiera se detectaron indicios indicativos de nada". Horas después en declaraciones a este diario, el magistrado sostenía que "pudo haber alguna conversación (entre Feijóo y Dorado) y si la hubo fue intrascendente". En todo caso, aseveró que durante 2001 y 2003 años en que Dorado era investigado por narcotráfico también fue objeto de seguimiento, aparte de pincharle los teléfonos, y no se detectaron encuentros con Feijóo.

El titular de la Xunta aseguró cuando saltó la polémica que mientras se relacionó con Dorado no sabía quién era, pero que cortó la relación al enterarse de que estaba inmerso en causas judiciales y que la última vez que coincidió con él fue en 1999 en el entierro de Manuel Cruz, el chófer de la Xunta que le habría presentado a Dorado.

El juez Vázquez Taín defendió ayer que "no había absolutamente ningún indicio" ni en las fotos ni en las conversaciones y por ello "no libró testimonio o incóo diligencias previas". Advirtió de que las imágenes de Feijóo con Dorado, en un yate, no son las únicas. "Había fotos de mucha gente más, Dorado era muy dado a hacerlas. No se incautó ninguna por irrelevantes" y añade que entre algunas con políticos.