Un simple recibo de la luz puede ser crucial para el fisco. Un consumo disparado para una vivienda o negocio que se suponen vacíos hacen saltar las alarmas en Hacienda, que nada más recibir los datos de las eléctricas ponen en marcha una investigación sobre los inmuebles sospechosos. Esta medida, incluida en el Plan de Control Tributario, se ha traducido en casi 4.800 actuaciones de investigación en pisos (656 en la comunidad gallega) y 14.331 en actividades empresariales (848 en Galicia) durante el año pasado. Ahora toca esperar a que los propietarios y autónomos en el punto de mira de la Agencia Tributaria presenten su declaración de la renta -el plazo finaliza el día 1 de julio-, los que no incluyan el alquiler de la vivienda o rindan cuentas sobre su negocio se enfrentarán a una sanción mínima del 50% de la cantidad defraudada.

Siga leyendo la noticia en Orbyt, o suscríbase a La Opinión de A Coruña y tenga acceso completo a todas nuestras noticias sin límites.