Decenas de miles de personas se sumaron ayer a una manifestación histórica en Ferrol, eje central de una jornada de huelga general en la comarca convocada por los cuatro sindicatos mayoritarios -CIG, UGT, CCOO y USTG-, con un altísimo seguimiento que paralizó la industria en todos los polígonos y grandes superficies comerciales. Además, cerraron la totalidad del comercio y la hostelería del centro de la ciudad.

"El seguimiento pasa del 90%", manifestó Xesús López Pintos, uno de los dos secretarios comarcales de CIG, que destacó que la tranquilidad y la ausencia total de incidentes fue la tónica dominante de una huelga comarcal que arrancó el miércoles a medianoche y que los sindicatos ya consideran "histórica" por la alta repercusión que tuvo en todos los sectores.

Los sindicatos sitúan la asistencia a la manifestación en una horquilla que va de 70.000 a 120.000 manifestantes, aunque la Policía de Ferrol señala que hay una ocupación de 5.800 metros cuadrados de superficie, que equivale a unas 23.200 personas, a razón de cuatro por metro cuadrado.

La Xunta consideró que la repercusión de la huelga en la función pública en las comarcas de Ferrol, Eume y Ortegal fue del 16%. Por sectores, el Gobierno autonómico calculó que el porcentaje de seguimiento en el ámbito de la salud pública fue del 26%, del 17% en justicia y del 10% en el sistema educativo. Los sindicatos discreparon absolutamente de estas cifras y opinaron que el Gobierno gallego quiere limitar el eco de una huelga "sin precedentes en la comarca".