Las 180 empresas forestales gallegas volverán a proveer de eucalipto a las tres grandes pasteras del Noroeste peninsular -Ence, Portucel y Celbi- tras algo más de un mes de huelga. Los madereros y las compañías sellaron en Vilalba una tregua y este lunes los camiones volverán a llevar eucaliptos a la sede de Ence. El conflicto surgió a raíz de que los tres gigantes de la pasta de papel tomasen la decisión "a la vez" de reducir un 10% el precio de la tonelada de este tipo de árbol, hasta los 3,5 euros la tonelada. Esta situación generaba sustanciosas pérdidas a los empresarios de la madera, que tenían grandes cantidades de stock almacenado de producto que ya habían pagado, por lo que la caída en el precio les generaba un agujero en sus cuentas.

Este, el de los stocks pagados con sobreprecio, fue el punto más complicado de la tregua, según explicaron fuentes del sector. Para solventar este problema Ence negociará "de forma individual" con cada suministrador de eucalipto para "regularizar el valor de los stocks de madera comprada con anterioridad a la entrada en vigor de la baja de 3,5 euros por tonelada", explicaron fuentes de la patronal de las compañías forestales.

De este modo no se crearán "pérdidas injustas", agregan. "No es que hayamos solventado los problemas, por ahora lo que hemos hecho es desconvocar la huelga y crear una mesa de negociación" con las grandes empresas pasteras, según explica el representante de las empresas forestales, Daniel Villapol.

"Nosotros somos más industriales que ellos en el monte, no somos simples intermediarios, y eso queremos que se nos reconozca", ahonda. El objetivo de este foro de negociación es "ser el punto de referencia continuo para hablar de cuestiones vitales para el colectivo" de empresas forestales, añaden desde las madereras.

Los pequeños empresarios mantendrán una reunión con el presidente de Ence, Juan Luis Arregui, a fin de trasladarle personalmente las inquietudes del sector. "Llega un momento en que no puedes sostener más una medida como la que tomamos", explica Villapol en referencia a la huelga. "Eso -prosigue- obligaría a mandar gente al paro y acumular más problemas, y eso nunca lo quisimos". Desde el sector esperan que se pueda pactar un precio competitivo para ambas partes para que no se repita una situación que ha generado una merma en los ingresos de las empresas forestales de más de diez millones de euros.

Frente a este acercamiento está la posición de los propietarios de montes, que no se han querido sumar a este preacuerdo. "Vamos a seguir", explica su portavoz, Julio Aneiros, que reconoce que "la medida de presión no funcionó. Perdimos esta pequeña batalla" con la gran industria pastera. Este colectivo recomienda a los dueños de los eucaliptos que "no los malvendan", a menos que tengan "necesidades urgentes de ingresos".