Víctimas y familiares del accidente de Santiago, ocurrido el 24 de julio de 2013 y en el que hubo 81 fallecidos y 147 heridos, anunciaron ayer que denunciarán al Gobierno ante la Comisión Europea por incumplir la normativa en seguridad ferroviaria. El anuncio lo realizaron en una protesta en contra del nombramiento como nuevo ministro de Justicia de Rafael Catalá, a quien acusan de ser el "responsable político directo del accidente" durante su mandato como secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, cargo que ocupó cuando se produjo el accidente en Angrois.
Por otra parte, el presidente de la comisión técico-científica para el estudio de la mejoras en el sector ferroviario, Iñaki Barrón de Angoiti, considera que la filtración y publicación de las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad que recogen el momento en que descarriló el tren Alvia en Angrois hicieron un "daño incalculable a la imagen del ferrocarril y de España".
"A las doce horas esas imágenes estaban ya dando la vuelta en Japón y eso es una de las cosas que más me duele por respeto a las víctimas sin identificar. A mí me parece indecente", declaró Barrón. "Y menos mal que no se han filtrado más cosas. Y esto no tiene nada que ver con la democracia", comentó el presidente de la comisión.
