Los sindicatos exigieron ayer la dimisión de la conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, a la que acusan de "incompetente" y de "mentir" en el número de efectivos de la Xunta en la lucha contraincendios. Además, reclaman la convocatoria de una mesa de negociaciones para solventar los problemas del sector.

En una comparecencia conjunta, representantes de CCOO, UGT, CIG y CSIF pertenecientes al comité de empresa de los servicios antiincendios dependientes de la Xunta denunciaron escasez de efectivos y recursos obsoletos para combatir el fuego. Hay "motobombas con más de veinte años y no se reponen los guantes o cascos", afirman. Desde la Xunta, sostienen que "los medios son adecuados y funcionan bien".

Los trabajadores del dispositivo de lucha contra los incendios sostienen que son "1.200 personas menos" que los 7.000 que asegura la Consellería. En relación a las brigadas municipales, los sindicatos apuntan que "de las 545" que apunta Medio Rural hay "400 menos" en funcionamiento, una merma de 150 equipos que implica "un 36% menos de operatividad y cobertura de territorio". También cuestionan la formación de los brigadistas municipales y su "precaridad laboral y temporalidad", así como el proceso de contratación, que califican de "oculto", en el que "no se respetan las listas" y en el que se selecciona a "los amigos del alcalde y los concejales".

Recortes

Los sindicatos retan a Medio Rural a desmentir sus datos y están dispuestos a "colaborar" con el departamento que dirige Rosa Quintana siempre y cuando "se apueste por un servicio 100% público y único".

El representante del comité de empresa de CSIF en Pontevedra, Jordi Pérez, alertó además del "cierre en los últimos cuatro años del 30%" de los puestos de vigilancia, según los datos oficiales, aunque en la práctica "la reducción es del 50% desde 2011".

Pérez afirmó que "sin nadie que detecte los incendios, nadie los puede apagar" e instó a Medio Rural a que diga "cuáles de las 73 casetas de vigilancia" distribuidas por Galicia "están abiertas" y en "qué condiciones".

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, defendió ayer que "el servicio de extinción es muy grande y funciona bien".

Remarcó el "enorme esfuerzo" que el Gobierno gallego hace en la lucha contra el fuego y garantizó que "la práctica totalidad de las plazas" del dispositivo están "cubiertas en más de un 90%".