Trabajadores de la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) de Laza, la única que existe en Galicia, se movilizaron ayer por las calles de Ourense para exigir mejoras laborales, coincidiendo con una nueva reunión que mantiene este colectivo con Tragsa, empresa de la cual dependen, en Madrid. Con este acto, los brigadistas inician la que será su cuarta semana de huelga para reclamar mejoras salariales y laborales. Los brigadistas cobran unos 900 euros mensuales, incluido el plus de peligrosidad, de tres euros diarios. Por el momento, mantendrán la "huelga indefinida" hasta que la empresa escuche sus demandas.