El secretario general de Unións Agrarias, Roberto García, dijo que la "palabra" es lo de menos en el acuerdo que persiguen los ganaderos gallegos con su campaña de movilizacionesganaderos movilizaciones, porque se le puede llamar "precio mínimo" o "precio sostenible", pero lo que se persigue es que ninguna de las partes abuse "de su posición dominante" para imponer a las otras una remuneración por debajo de lo que cuesta producir.

"El sector lácteo en Galicia persigue que, de forma organizada, distribución, industria y ganaderos lleguen a un acuerdo que obligue a las partes a no remunerar por debajo de lo que cuesta producir", explicó García a EFE, antes de una nueva tractorada, que hoy se celebrará en Curtis (A Coruña).

Se trata, aclaró el secretario general de Unións Agrarias, de que "ninguna de ellas, abusando de su posición dominante, le imponga a la otra un precio que no cubra costes".

Para ello, opina que es necesario "un trabajo previo" por parte de la Administración, que "tiene muchas herramientas de seducción para decirle a la industria y a la distribución que tienen que firmar ese acuerdo, porque es conveniente para todo el sector".

En todo caso, recordó que la Administración también tiene "herramientas para convertir algo voluntario en una dinámica obligatoria para todos, con una sanción para quien incumpla".

"Si tenemos garantizado eso, que es más o menos lo que se firmó en Francia, estaremos consiguiendo que ninguna parte remunere a la otra por debajo de lo que le cuesta producir. Si eso se llama precio mínimo o sostenible, nos da igual. La palabra es secundaria", zanjó.

La plataforma en defensa del sector lácteo ha convocado para mañana una reunión en la Casa Sindical de Lugo, a partir de las 11, con todos los sectores económicos de la comarca para preparar la tractorada que marchará sobre la capital lucense el próximo día 3 de septiembre.