El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, ha reclamado hoy a las autoridades europeas una política "coherente, humanitaria y sensata" y ha resaltado el compromiso del Gobierno gallego para acoger refugiados.

Al finalizar una visita realizada a la zona afectada por el incendio de Cualedro, el titular del Ejecutivo gallego ha prometido que la Xunta colaborará en la acogida de refugiados "una vez que se concreten las personas que pueden tener refugio en cada país".

Precisamente, el gobierno gallego avanzó ayer la habilitación de 300 plazas en caso de ser necesario.

En este sentido, Núñez Feijóo ha trasladado al Gobierno central la "solidaridad" de Galicia y ha destacado el protagonismo de España a la hora de conseguir que la Unión Europea "considere el problema de la inmigración como un problema europeo".

"España sabe mucho de inmigración porque llevamos padeciendo desde hace décadas una inmigración como consecuencia de ser frontera del continente africano", ha remarcado Feijóo, quien ve necesaria una política "que ataque el problema de raíz", en aquellas zonas donde hay conflictividad, donde hay hambre y subdesarrollo económico.

A la espera de una solución, ha destacado que Galicia pone a disposición del Estado "trescientas plazas para trescientas personas que puedan requerir asilo".

En este momento, ha apuntado que el gobierno gallego cuenta ya con "establecimientos públicos para acoger a esas familias", en concreto en zonas de O Carballiño, Panxón, entre otras.

"Y en el caso de que familias gallegas quieran apoyar ante la eventualidad de que haya refugiados en Galicia", ha detallado que la Xunta estará en "coordinación permanente con esas familias que, en un acto de solidaridad quieran dar cobijo a esas familias que puedan venir a Galicia", ha detallado el mandatario gallego.