El fuego regresó ayer al perímetro rural de Ourense con un incendio que afectó a los núcleos de Cudeiro, Vilar de Astrés y Eiroás, sembrando el pánico entre los vecinos y provocando momentos de tensión por la proximidad de las llamas a las casas. Dos viviendas fueron desalojadas por prevención. A las 20.10 horas, la Xunta declaró el nivel 2 de emergencia ante el peligro de que las llamas afectasen a la población. La alerta quedó desactivada a las 22.17 horas. La superficie afectada ronda las 23 hectáreas, que se suman a las 55 arrasadas el pasado sábado