Mientras en Madrid el sector lácteo se jugaba su viabilidad en una reunión con la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, en Galicia el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, hizo una llamada al entendimiento de todas las partes haciendo hincapié en que industria y distribución deben poner de su parte y apelando a que el sector lácteo gallego no se "descuelgue". Pero también instó a los ciudadanos a colaborar para ayudar a los ganaderos. El titular de la Xunta instó a los gallegos a no comprar leche en establecimientos que vendan por debajo de los costes de producción y que se aseguren de adquirir leche cien por cien gallega.
Por su parte, dejó claro que el Gobierno gallego "ha estado, está y seguirá estando del lado de los ganaderos". Y como muestra el Consello de la Xunta aprobó ayer conceder una moratoria de dos años a los ganaderos que hayan pedido préstamos para ampliar sus explotaciones o para incorporar jóvenes al campo. Esta medida podrá beneficiar hasta a 1.100 granjas en la comunidad autónoma. La Xunta aportará un millón de euros hasta 2017 para liberar a estos productores de pagar tanto la amortización de sus préstamos como los intereses.
Para Feijóo es una "injusticia" que la bajada de precio de la leche solo esté "castigando" a los ganaderos y advirtió a industria y distribución de que "si no hay producción láctea, no hay industria y si no hay industria los precios de la leche los marcarán desde fuera".
Feijóo insistió mucho además en que el sector lácteo gallego debe sumarse al acuerdo que se alcance en Madrid. "Galicia no puede quedar descolgada", advirtió. "En la comunidad gallega no queremos un conflicto, queremos una solución", advirtió.
Preguntado por si está previsto algún dispositivo especial en caso de que los tractores permanezcan en la capital gallega, Feijóo aclaró que son los "alcaldes" los que "tendrán que explicar" los dispositivos y recordó que algunos se han mostrado favorables a las protestas, en alusión al regidor compostelano, Martiño Noriega.
