Industrias y distribución comienzan a hacer "gestos" a un sector productor lácteo que en Galicia este fin de semana ha arreciado en sus movilizaciones con bloqueos a las fábricas que prevén extender a la distribución pese a que algunas organizaciones, como Asaja o Agaca, se hayan desmarcado de las protestas. Mercadona, Vegalsa (distribuidora de Eroski y Familia), Leche Celta y Capsa (Corporación Agroalimentaria Peñasanta SA) empezarán a poner su grano de arena para recuperar los precios. Mientras unas empresas subirán el precio de leche en los lineales otras elevarán lo que abonan a los ganaderos. Para parte de los productores que ayer mantenían las protestas y acciones de bloqueo, estas medidas son un principio pero "insuficientes".

Desde la distribución, Mercadona informó ayer de que la empresa, sus interproveedores lácteos y otros proveedores que envasan bajo la marca Hacendado han acordado pagar "más" por litro de leche a los ganaderos nacionales con los que trabajan. En esa línea, se comprometen a aplicar hasta "un máximo" de dos céntimos de euros por litro entre sus productores, un total de 3.100 en España, el 28% de ellos (casi 870) en Galicia. La compañía asegura que el incremento de costes, que se hará ya efectivo en las liquidaciones de septiembre, "no se trasladará al precio final que pagan los clientes".

Por su parte la empresa de distribución Vegalsa-Eroski aseguró que había incrementado ayer dos céntimos el precio de la leche en las cadenas de supermercados Eroski center, Eroski city y Familia, y que se había dirigido a sus proveedores "para que trasladen este incremento a los ganaderos". La firma alega que tomó la decisión para "apoyar el esfuerzo de las administraciones y de la interprofesional láctea en alcanzar un marco estable y sostenible para el sector", al tiempo que se reafirma en su "compromiso con las producciones agrarias y ganaderas gallegas".

La distribución no fue la única en realizar movimientos en un momento en que los ganaderos están paralizando "el 100%" de las industrias de la comunidad y vertiendo miles de litros de leche. Según la Asociación Galega de Cooperativas (Agaca) y el sindicato Asaja, Leche Celta y Capsa (que tiene marcas como Central Lechera Asturiana o Larsa) también han movido ficha. Asaja informaba de que ambas empresas les avanzaron que renunciarán a los contratos a la baja firmados para este trimestre. Además, según Asaja, desde Corporación Peñasanta les aseguraron que en cuanto la distribución les repercuta una subida en el precio de la leche, la "trasladarán directamente" a los productores. Para Asaja la actitud de estas empresas es "generosa", si se tiene en cuenta el bloqueo que intentan "aislados grupos de ganaderos".

Cuando el jueves pasado dos de las grandes organizaciones de productores del Estado, UPA (en Galicia, Unións Agrarias) y COAG (Sindicato Labrego Galego, en Galicia) se negaban a firmar el preacuerdo que había auspiciado el Ministerio de Agricultura entre distribución, industria y ganaderos para "recuperar" los precios en el sector lácteo, alegaban que no se "fiaban" de la declaración de intenciones de los otros dos eslabones de la cadena y reclamaban "garantías" de su cumplimiento y definición de lo que se entiende por precio "sostenible", puntos que volvieron a subrayar ayer en sus alegaciones al preacuerdo de Madrid. Entonces avanzaban que esperaban ver "gestos" de buena voluntad de distribución e industria, como ocurrió ayer. Ahora confían en que se "generalicen" y "cunda el ejemplo".

Sin embargo, esos "gestos", y pese a que les dan la bienvenida, son todavía "insuficientes" para la Plataforma en Defensa do Sector Lácteo, que no desiste de momento de los bloqueos a una quincena de fábricas gallegas y que seguía planteándose ayer hacer lo propio con centros logísticos de empresas como Mercadona, Vegalsa o Gadisa. Además, no descartan volver a poner a DIA en el punto de mira. Tras bloquear su almacén en Santiago varios días, ganaderos y la cadena habían acordado, según la plataforma, que los productores se retirarían si los trabajadores del centro de distribución recuperaban su empleo en las condiciones en que estaban antes del bloqueo y si la empresa se comprometía a no emplear la leche como reclamo. Los ganaderos „que estiman en 21 millones de litros de leche los tirados desde el sábado„ dicen que DIA tenía que emitir un comunicado y no lo hizo.

El Sindicato Labrego Galego mostró ayer su "apoyo total" a los ganaderos movilizados, aunque concede que los "gestos" de Mercadona o Vegalsa son "positivos". Por su parte la Federación Rural Galega (Fruga), ante la finalización del plazo dado por el Gobierno para firmar la propuesta de acuerdo, defendió que antes de poner una rúbrica hay que consultar a los ganaderos y que debe crearse una comisión de seguimiento en Galicia con representación de todo el sector para velar por el cumplimiento de lo acordado. Además, reclaman que el Gobierno gallego asuma el papel de "árbitro" y "garante" del cumplimiento en dicha comisión.

Mientras algunas empresas daban pasos explícitos, desde las asociaciones que agrupan a distribución e industria no daban detalles acerca de la repercusión del bloqueo. En el caso de la industria apuntaban a que "seguirían trabajando en el desarrollo del acuerdo", mientras desde la distribución recordaban su disposición a avanzar en él si cesan las acciones de presión. En esa misma línea incidía la Xunta, cuyo vicepresidente, Alfonso Rueda, volvía a pedir a los ganaderos que se sumen al acuerdo y que "no impidan" trabajar a quien quiera hacerlo.

Los ganaderos habían pedido una reunión con el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo. "Mientras no nos reciba y no se den pasos para adelante, no se va a desbloquear la situación", advertían desde la Plataforma en Defensa polo Sector Lácteo. Sin embargo, Feijóo estaba ayer en Milán y el único acto público anunciado para hoy es en Roma. La secretaria de Organización del PSdeG, Pilar Cancela, precisamente censuraba ayer los viajes que el mandatario realizó fuera de Galicia mientras sectores "estratégicos" gallegos viven una situación de máxima "inquietud". No obstante, el PSdeG se desmarcaba ayer de las medidas de presión de los ganaderos, aunque pedía a la Xunta "diálogo" para resolver su problema. Por su parte, el BNG incidía en que la situación "se sigue agravando" mientras el PP gallego animaba a los ganaderos a trabajar unidos y a dialogar.