La crisis, y en especial la inmobiliaria, ha provocado la caída en picado en el sector de la construcción en los últimos cinco años con una reducción del 35,5% en su cifra de negocio y la destrucción de 50.000 empleos. La recesión obligó a muchos ciudadanos a aplazar su idea de meterse a una hipoteca por tratarse de un gasto elevado y a largo plazo en medio de la incertidumbre laboral. Pero pasados los años más duros de la crisis, los gallegos empiezan a animarse de nuevo a comprar piso, aunque sin llegar ni mucho menos a los números de la época del boom del ladrillo.

Las estadísticas de transacciones inmobiliarias del Colegio del Notariado recogidas por el Ministerio de Fomento revelan que en el segundo trimestre del año, la compraventa de viviendas en Galicia creció un 18,5% respecto al mismo periodo del año pasado. Entre los meses de abril y junio se comercializaron en la comunidad gallega unas 3.929 viviendas, la cifra más elevada desde que en 2010 comenzaran a desplomarse las ventas. La vivienda libre concentra el 95% del total -unas 3.752 compraventas- frente a las 177 de pisos protegidos.

Los notarios diferencian además entre vivienda usada y nueva y advierten de que el mayor repunte se da en los inmuebles de segunda mano con un 20% más de operaciones -al pasar de 2.417 a 2.968-, mientras que los 960 pisos a estrenar entre abril y junio son solo un 7% más que la vivienda nueva registrada en el segundo trimestre de hace un año.

Las provincias de A Coruña y Pontevedra son las preferidas por los gallegos para asentarse y adquirir su hogar, con 1836 y 1.080 operaciones respectivamente. En cuanto a las zonas del interior, se realizaron 637 compraventas, casi el doble que en Ourense, con apenas 376. En números relativos es la provincia ourensana, sin embargo, la que más creció, con un 32% más de transacciones en comparación a las 284 del segundo trimestre de 2014. El aumento en A Coruña también supera la media autonómica con un 25% más de compraventas respecto al año pasado. El crecimiento es más suave en Lugo con un 17% y en Pontevedra con una subida del 5%.

Las diferencias también son notables entre las grandes ciudades. A Coruña y Vigo, con 473 y 382 compraventas en cada caso, copan casi la quinta parte de las realizadas en toda la comunidad. Pero es en Ferrol donde el auge de la demanda en el mercado inmobiliario se ha notado más, al incrementarse el número de ventas en un 62%, pasando de las 86 transacciones del segundo trimestre de 2014 a las 140 del mismo periodo de este ejercicio. Por encima del 18,5% de aumento en Galicia se sitúan además las ciudades de Ourense (+50%) y A Coruña (+28%).

La comunidad gallega ha mejorado sus cifras frente a la media estatal y si en el primer trimestre del año la compraventa crecía en Galicia a un ritmo menor que en España -en concreto ocho puntos menos- de abril a junio la tendencia ha cambiado. El 18,5% de subida en Galicia está casi cinco puntos por encima del aumento del 13,9% a nivel nacional. También ha pasado de ser la tercera por la cola entre las autonomías con incremento de ventas a colocarse como la quinta comunidad con mejores resultados. Los peores datos se registraron en Navarra (-14,7%), Extremadura (-1,5%) y País Vasco (-0,6%).