La conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, ha manifestado que "hay que dejar a los profesionales" que sean "los que decidan" en el caso de la menor de 12 años a la que, según han denunciado sus padres, los médicos del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) niegan una muerte digna porque rechazan retirarle la alimentación artificial que la mantiene con vida.

En este sentido, y aprovechando su intervención en una interpelación en la sesión plenaria del Parlamento, la titular de Sanidade ha asegurado que "por la información" de la que dispone del Servicio de Pediatría, le han asegurado que "no hay ensañamiento terapéutico", como dice la ley, y ha remarcado que tampoco "se le pueda pedir a los profesionales la eutanasia activa".

"Creo que están cumpliendo con su obligación", ha remarcado Rocío Mosquera, remitiéndose a la información que le han trasladado y que ha indicado en su intervención. "Lo afirman y así lo creo, no hay ensañamiento terapéutico", ha sentenciado.

La titular de Sanidade ha apuntado que se está "cumpliendo" con lo que dicta la ley en ese sentido y ha apelado a dejar este caso en manos de los "profesionales", como "no puede ser de otra manera".

A su juicio, "no hay discrepancia entre la comisión de bioética", frente a lo que señalan los padres de la pequeña Andrea, que sostienen que el comité de ética asistencial avaló en un informe la limitación del esfuerzo terapéutico y la retirada del soporte vital.

"Se va a cumplir la ley y se le va a dar la mejor asistencia a esta paciente como a cualquier otra paciente", proclamó la conselleira de Sanidade después de que la diputada del PSdeG Carmen Acuña plantease esta cuestión.

La parlamentaria socialista advirtió a la conselleira que "toca cumplir la ley" de derechos y garantías de los enfermos terminales que se aprobó en la Cámara por unanimidad hace tres meses.