El PP aprobó ayer en solitario una proposición no de ley para exigir al Concello de Ferrol que "cumpla" con sus obligaciones en lo relativo a la depuradora de cabo Prioriño, mientras toda la oposición le reprochó el "fraude" de que la maquinaria no estaba funcionando pese a que se cobraba a los ciudadanos una tasa por el saneamiento.

Ante el pleno de la Cámara, el diputado del PP Miguel Tellado censuró la actitud del "nuevo alcalde", Jorge Suárez, con respecto a esta infraestructura, cuyo coste rondó los 100 millones de euros. "Denunció falsamente que el agua no era tratada con el único ánimo de desprestigiar el difícil proceso de puesta en marcha de la depuradora", reprobó, tras asegurar que, pese a que existen "desperfectos" en la instalación, ésta ha supuesto que "se dejaron de verter 2,2 millones de metros cúbicos de aguas fecales" a la ría de Ferrol. Así es que ha defendido su iniciativa, en la que pide al Concello que "cumpla" con sus obligaciones para "garantizar el saneamiento y la depuración de las aguas residuales" y a la Xunta que "preste colaboración técnica y asesoramiento" en este proceso.