Si la AP-9 incrementó su tráfico en los primeros siete meses en un 5,5%, con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, el tránsito en todas las autopistas de peaje nacionales aumentó en un 6,7%. La red de vías de pago nacional sigue así recuperando usuarios después de conseguir el pasado año una subida del 2,6% con el que puso fin a siete años de caídas.

El incremento acumulado en los siete primeros meses de 2015 se vio impulsado por el repunte del 9% que registró el tránsito de vehículos en julio. Con este aumento, las autopistas españolas encadenan 16 meses consecutivos de subidas interanuales mensuales. Fue en 2014 cuando el tráfico en las autopistas de peaje volvió a tasas positivas por primera vez en ocho años al aumentar el 2,3 %.

No obstante, a pesar de estas subidas, y dado el desplome registrado durante los años de caídas, el volumen medio de usuarios de las autopistas aún se mantiene en niveles similares a los de mediados de la década de los noventa, cuando además la red de vías de pago presentaba una longitud de unos 1.760 kilómetros, frente a los 2.550 kilómetros que suma en la actualidad.

El conjunto de ocho autopistas en quiebra saldaron los siete primeros meses con un aumento del tráfico del 7%, porcentaje que incluso supera el crecimiento medio del conjunto de la red.

Todas estas vías presentan aumentos en el número de usuarios entre enero y julio salvo dos. Una es la que une Madrid con Toledo, que presenta un nuevo desplome del 17,5% en su volumen de tráfico, de forma que apenas contabiliza 769 coches al día, y la que enlaza Ocaña y La Roda, con una disminución del 0,56%, hasta los 2.807 vehículos diarios.