Los cruces de acusaciones sobre las ayudas de 300 euros por vaca entre el Gobierno y la oposición y los sindicatos no cesan. La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, se defendía el miércoles de las críticas y aseguraba que el 80% de las ayudas para paliar la crisis del sector lácteo, y en concreto, de las explotaciones que venden a pérdidas. A estas declaraciones de Tejerina, el secretario xeral de Unións Agrarias (UUAA), Roberto García, señaló que efectivamente la mayoría de los perceptores de las subvenciones estatales serán granjas gallegas porque las más de 9.000 instalaciones ubicadas en Galicia representan el 55% de las 17.500 repartidas por toda España.

Para García es "una evidencia" que la comunidad gallega reciba la mayoría de las ayudas, pero eso no quiere decir-aclara- que la mayoría de los productores gallegos vayan a ser beneficiados. En este sentido, aclara que del 100% de ganaderos que vendieron por debajo de costes durante esta campaña, solo el 30% recibirán ayudas por vaca del Ministerio de Agricultura, mientras que el 70% restante -más de 6.000 explotaciones- no entrarán en el reparto de las subvenciones.

Otra de las incógnitas del decreto de Agricultura tiene que ver con los criterios del reparto. Unións Agrarias anunció precisamente que recurriría a la Audiencia Nacional para denunciar criterios "arbitrarios" entre comunidades, a lo que Tejerina contestó el miércoles que existe "un único umbral para toda España". Las declaraciones de la ministra no convencen ni al sindicato ni al BNG, pues ayer ambos recordaron el decreto del ministerio recoge que para repartir los 20 millones de ayudas directas al sector lácteo se utilizarán los datos de la Red Nacional de Granjas Típicas (Rengrati). Esta estadística evidencia diferencias entre autonomías al fijar que una granja gallega es rentable desde 24,5 céntimos frente a los 24,7 en una de Castilla y León y los 31 necesarios para que una granja de Andalucía sea rentable. El Bloque pide, por eso, que se suba el baremo en Galicia para que las ayudas lleguen a todas las granjas "en peligro de cierre".