El presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar Blanco, evitó pronunciarse sobre su caso en el Parlamento de Galicia después de escuchar acusaciones de "violencia de género" y exigencias de dimisión por parte de los grupos de la oposición.

Baltar Blanco compareció en la comisión de economía para exponer las líneas generales de los presupuestos de la institución provincial para el año que viene.

Sin embargo, las intervenciones de los portavoces de PSdeG, AGE y BNG se centraron, casi exclusivamente, en el reproche a la "pésima imagen" que el presidente de la Diputación ourensana traslada al organismo provincial tras haber sido denunciado por una mujer que asegura que él le ofreció un puesto a cambio de sexo. A preguntas de los medios en la mañana de ayer en Ourense, el presidente de la Diputación había insistido en que la denuncia constituye "un asunto exclusivamente personal y no se va a debatir estando presente el Partido Popular" en el ente provincial.

"Esto no es un asunto del presidente de la Diputación de Ourense, sino de José Manuel Baltar", reiteró el dirigente popular. Preguntado en relación a que la oposición provincial volverá a reformular la propuesta de urgencia para abordar este caso en el pleno, afirmó, tajante: "Es un asunto ya tratado y resuelto, punto".

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, también evitó ayer pronunciarse sobre la situación del titular de la Diputación de Ourense y presidente provincial del PP. En la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de su Ejecutivo, el presidente gallego esquivó dos preguntas en relación a si avala la decisión de Baltar de no dar explicaciones o la reprobación aprobada en la Diputación por la oposición ante la ausencia de todos los representantes del PP, y remitió al pleno de la próxima semana, donde deberá responder a los grupos.