Decenas de congresos y estudios analizaron en los últimos años la emigración gallega de los siglos XIX y XX. Pero es en los detalles donde se aprecia mejor lo que se vivió en aquellos años. El Ateneo Ferrolán ha puesto el foco en dos lugares separados por 7.000 kilómetros para analizar de manera más minuciosa lo que sucedió en aquella época: Cuba como receptora de los emigrantes y Ferrol y su comarca como emisores.

Desde hoy y hasta el domingo, más de una veintena de ponentes analizarán a través del fenómeno de la emigración la relación que existió entre la isla caribeña y los miles de personas que tuvieron que salir de Ferrol, Eume y Ortegal.

Muchos tuvieron que emigrar por cuestiones económicas, pero también lo hicieron por razones políticas. Y no porque estuvieran en el lado perdedor tras la Guerra Civil, sino que ese exilio forzoso se produjo mucho antes. Lo explicará Xurxo Martiz en su conferencia O primeiro exilio galego a Cuba, que forma parte del congreso Ferrol-Cuba-Galiza, historias comúns, que se celebrará en el Ateneo Ferrolán.

La guerra de Marruecos (1911-1927) provocó importantes conflictos en la sociedad española. Uno de ellos se debió a que los jóvenes adinerados podían librarse del servicio militar y, por lo tanto, de acudir a la contienda si pagaban. "Era obligatorio hacer el servicio militar, pero te podías librar por 1.500 pesetas si te tocaba hacerlo en España y por 2.000 si era fuera", detalla Martiz. Pero esta cantidad era inasumible para la inmensa mayoría de los jóvenes gallegos. Por ejemplo, un billete a Cuba costaba 400 pesetas. "Era una cifra inalcanzable, sobre todo porque hay que tener en cuenta que gran parte de los que se marchaban pedían el dinero prestado para el viaje", relata. Por eso en aquella época se decía que "los hijos de los pobres iban a morir a Marruecos".

Esta situación obligó a numerosos gallegos a hacer las maletas y a emigrar a Cuba para no tener que ir a la guerra de África. Por eso, un elemento que destacan todos los expertos es que la emigración gallega a la isla fue de hombres, jóvenes y solteros. Fueron los primeros exiliados. Cuarenta años después, sus nietos participarían en la revolución cubana.

No hay cifras exactas del número de jóvenes de la comunidad que viajaron a Cuba en esta época para evitar la mili, pero Xurxo Martiz apunta que entre 1911 y 1921 más de 358.000 españoles emigraron a Cuba. De ellos, un tercio eran gallegos. En 1921 el 41% de los emigrantes españoles que residían en Cuba habían nacido en Galicia.

El camino que escogieron los jóvenes gallegos fue más pacífico que, por ejemplo, en Cataluña. En julio de 1909, en la denominada Semana Trágica de Barcelona, murieron un centenar de personas que protestaban porque sus hijos tuviesen que coger las armas. Aún así, no había en España en aquellos años una región que tuviese una tasa mayor de deserción que la gallega.

Y eso que había sanciones económicas muy elevadas para los cómplices de la fuga de los desertores, que podían terminar en la cárcel. Además, un joven que denunciase la existencia de un desertor tenía derecho a la reducción del servicio a 12 meses.

El congreso Ferrol-Cuba-Galiza, historias comúns también abordará, entre otros aspectos, la participación de la emigración en la vida social de Cuba, las transferencias culturales entre ambas partes o el papel de la mujer.

También tratará la influencia de la emigración en la formación de la identidad nacional gallega, cómo se agruparon en torno al Centro Gallego e Hijas de Galicia, cómo intervinieron en la formación de instituciones como la Real Academia o en la creación de símbolos nacionales como el himno gallego o la bandera. El himno gallego se estrenó en diciembre de 1907 en el Centro Gallego de La Habana -hoy Gran Teatro de La Habana-.

Los emigrantes de Ferrol y su comarca que llegaron a Cuba también vivieron experiencias que no tuvieron el resto de gallegos que salieron de Galicia y que fueron a otros países de Sudamérica. Fueron testigos, por ejemplo, de la guerra de independencia en la isla, la intervención de EEUU, las diferentes crisis económicas y finalmente la revolución cubana. Todos estos temas se tratarán en el congreso.

El evento arranca hoy a las 19.30 con el acto inaugural en el salón de actos del Ateneo. Participarán Jorge Suárez, alcalde de Ferrol, y José Antonio Solana, cónsul general de Cuba en Galicia, Asturias y Cantabria. La conferencia inaugural correrá a cargo del escritor Xosé Neira Vila, uno de los grandes expertos en la emigración gallega que se instaló en Cuba.

La jornada de mañana empezará a las 09.30 horas y durante nueve horas (habrá un parón de 14.00 a 16.30 para la comida) participarán 15 ponentes. El domingo será el turno de otros seis, que podrán el colofón a este congreso que pretende analizar el papel de los habitantes de Ferrol en la emigración a Cuba.