La Consellería de Medio Ambiente destaca que cada año se conceden en Galicia casi 50.000 licencias de caza, lo que significa que de cada 100 gallegos, dos son cazadores. Además, el 90% del territorio gallego está acotado para la práctica de la caza, es decir, casi 2,6 millones hectáreas de las 2,9 con las que cuenta la comunidad. La temporada de caza 2015-2016 que arrancó este mes se prolongará hasta el Día de Reyes y los cazadores con licencia podrán ejercer su actividad en 453 tecores de la comunidad. Aunque la actual Lei de Caza permitía abatir animales en pistas asfaltadas que no tienen la consideración de carreteras, la Xunta modificará la norma tras una queja del Valedor do Pobo. El sector advierte de que las nuevas restricciones reducirán la superficie apta para esta práctica hasta en un 50%. Cuando entró en vigor la nueva Lei de Caza, hace dos años, y tras las propuestas de varias sociedades cinegéticas que querían saber en qué condición quedaban las pistas comarcales o de la concentración parcelaria, Medio Ambiente dijo que la Lei de Caza aborda este aspecto, pero entiende que es el reglamento de la norma, que se está diseñando, el instrumento para esclarecer las dudas que puedan surgir de la aplicación práctica de la legislación. Vázquez insistió en que el Gobierno gallego no tiene prioridad de prohibir, sino de regular la actividad cinegética para que sea segura.