A Coruña y Lugo, con una tasa de congestión por encima del 2,7 están entre las provincias españolas con los juzgados con más sobrecarga de trabajo. De hecho, tan solo los órganos judiciales de Toledo los superan, con un índice del 3,04, según los datos del tercer trimestre del Poder Judicial. Por el contrario, los tribunales de Pontevedra y Ourense tienen una carga de trabajo por debajo de la media nacional (2,29), con una tasa del 2,03 y del 2,27, respectivamente.

Los juzgados de lo social registran la tasa de congestión más alta: en los juzgados de A Coruña y Lugo está por encima del 8; mientras que en Pontevedra supera el 4 y en Ourense apenas llega al 2,4. En lo penal, salvo Ourense, que está por debajo de la media, los juzgados de las otras tres provincias gallegas (entre el 0,8 y el 1,1) están por encima del resto de órganos del país (0,63). En lo contencioso, solo Lugo (4,86) supera la media (4,25).