Los tímidos avances que la economía gallega está experimentando tras la salida de la doble recesión, especialmente el pasado 2014, todavía no compensan el enorme impacto acumulado en los años más duros de la crisis. Entre 2010 y 2012, la caída en el conjunto de la comunidad fue del 4%. ¿Y en los concellos más grandes? En aquellos que superan los 20.000 habitantes, donde se concentraba en 2012 el 61,5% de todo el Producto Interior Bruto (PIB) gallego, hay una docena en los que el descenso es superior a la media autonómica. Especialmente en Lalín, con un desplome de su economía entre 2010 y 2012 del 13%, según los datos que acaba de publicar el Instituto Galego de Estatística (IGE). Las caídas alcanzan el 9,9% y el 9,5% en Marín y Ferrol, respectivamente; y el 7,7% en Culleredo.

El recorte en A Estrada fue del 6,7% en esos dos años; del 6,4% en Redondela; un 6,2% en Vilagarcía; del 6,1% en Santiago de Compostela; un 5,9% en Narón; un 5,7% en Ames; un 5,6% en Ourense; y un 5,5% en Vigo.

El descenso alcanzó el 4,7% en Oleiros; el 4,6% en Ponteareas; el 4,5% en Pontevedra; un 4,2% en Cambre; un 3,6% en Carballo; un 3,4% en Lugo; un 2% en A Coruña; y un 1,9% en Cangas. Quedan dos concellos en ese grupo de los más grandes en los que el estallido de la grave crisis no se cebó con su PIB. El de Arteixo, que creció un 2,1%; y Ribeira, donde la economía local aumentó un 6,2%.