La gallega Pilar Cancela no tiene ninguna duda de que PSOE y Podemos van a llegar a un pacto de Gobierno. Debuta en el Congreso en esta legislatura y será la única mujer que presida una de las siete comisiones que les corresponden a los socialistas, la de Igualdad. "Si eres socialista y tienes principios y valores socialistas, la verdad es que es todo un honor", reconoce.

-Presidenta de la comisión de Igualdad del Congreso. ¿Qué se hace en una comisión de Igualdad?

-La igualdad es uno de los temas más transversales que puede haber en política. Es una materia tremendamente amplia y para cualquier mujer, y sobre todo si eres socialista y tienes principios y valores socialistas, la verdad es que es todo un honor. Por desgracia, a pesar de que tenemos uno de los marcos legislativos más avanzados en Europa y además es un referente a nivel internacional en la lucha a favor de la igualdad real y efectiva también considero que en los últimos tiempos no se ha trabajado desde el ámbito político lo suficiente para que ese marco legal sea real.

-Hablando de igualdad, le habrá dado un tirón de orejas a sus compañeros socialistas: el PSOE preside siete comisiones y solo una recae en una mujer, usted.

-En este caso la matemática resulta así, pero el planteamiento que se hace es global. No es solo con respecto a la presidencia de las comisiones sino que después se han tenido en cuenta las vicepresidencias o las portavocías donde hay un número importante de compañeras. En global sí creo que es tremendamente paritario e igualitario. Es cierto que si lo circunscribimos a las presidencias de las comisiones es una realidad.

-Es la foto que sale...

-A mí me hubiera gustado que no fuese así, y que, por lo menos, fuera paritaria.

-Todavía no hay un Gobierno formado y no se sabe si habrá nuevas elecciones, ¿no vive la constitución de estas comisiones como algo interino?

-Lo deseable es que la interinidad termine cuanto antes. Es cierto que las circunstancias que se dan son excepcionales y de indefinición pero la labor parlamentaria puede perfectamente empezar a caminar.

-Por cierto, ¿cómo ve el inicio de las negociaciones para formar el Gobierno?

-Tenemos que ser coherentes. En campaña decíamos, sobre todo los partidos que nos consideramos de izquierda, que queríamos conformar una alternativa al Gobierno del Partido Popular y además nosotros decíamos que queríamos encabezar ese gobierno alternativo. Pues ahora ha llegado ese momento.

-Pero hay mucho baile de salón.

-Independientemente de las puestas en escena de unos y otros y de cómo se quisieron gestionar los tiempos, ahora sí que llegó el momento de pensar seriamente en esa realidad. Si analizamos los programas con los que nos presentamos algunas fuerzas políticas a estas elecciones estoy segurísima de que lo vamos a conseguir porque además los he mirado y tenemos unos puntos de confluencia que superan con creces las diferencias.

-¿También con Ciudadanos?

-No. Yo me refiero a fuerzas progresistas.

-Lo digo porque el presidente de su partido se ha sentado a negociar con Albert Rivera.

-A Ciudadanos no lo considero un partido de izquierdas, aunque ellos estén jugando en la indefinición. Pero con Izquierda Unida o con Podemos tenemos más de un 70% de puntos de encuentro. Si hay voluntad política de conformar una alternativa de izquierdas no debería ser ese el problema. Por eso nuestro secretario general Pedro Sánchez lo ha dicho en reiteradas ocasiones: no se trata tanto del con quién sino para qué. Pues pongámonos de acuerdo en el para qué. ¿Para qué queremos gobernar este país? ¿Qué es lo que queremos cambiar?

-¿En esas puestas en escena a las que se refiere también entran las declaraciones de algunos alcaldes de las mareas que aseguran que se están planteando apoyar al PSOE en Madrid? ¿Son poses o van más allá?

-Habría que preguntarles a ellos. Pero no creo que ese sea el posicionamiento real de los representantes de En Marea en las tres ciudades de la provincia de A Coruña. En absoluto. Es más bien el resultado de un determinado momento, que además se puede entender porque cuando se están negociando los presupuestos lo que quieres es intentar llegar a un acuerdo para empezar a trabajar. Extrapolarlo al ámbito estatal no es oportuno.

-¿Entonces?

-Me parece más bien fruto de una pataleta del momento. Ya he recordado que están gobernando gracias al apoyo del PSdeG. Y eso no ha sido un apoyo no razonado, sino que lo que queríamos era facilitar gobiernos alternativos de izquierda. Luego, la gestión del día, cómo ponernos de acuerdo o cómo buscar puntos de encuentro eso es lo difícil pero para eso está la política. Todos tenemos obligación de sentarnos con la mejor de las intenciones para conseguir los acuerdos que la gente está esperando.

-Pero la gente lleva bastante tiempo esperando. Hace más de 40 días que fueron las elecciones, Pedro Sánchez ha pedido un mes de plazo para negociar? mi madre de dijo el otro día: "yo los cogía, los metía en una habitación, los dejaba salir cada dos horas para ir al servicio, pero no salían hasta que decidiesen algo sea para un lado o para el otro".

-Su madre lo que demuestra es que tiene sentido común.

-Las madres tendrían que gobernar el país.

-Si las dejásemos a un par de madres estoy convencida de que tendríamos el tema resuelto.