Los efectos de las intensas lluvias, los vientos huracanados y el fuerte oleaje de la última semana todavía se notaron ayer con más de 75 incidencias solo durante la mañana con la caída de árboles y ramas y acumulación de nieve en la calzada, según informaron desde Emerxencias 112. Las complicaciones se centraron en el mar con alerta naranja por olas de más de seis metros que obligó a toda la flota a quedar amarrada en puerto y también en el interior gallego por acumulación de nieve. Las nevadas y el hielo dejaron sin clase ayer a un total de 2.224 alumnos de 37 centros educativos de las provincias de Lugo y Ourense.

Las fuertes nevadas de los últimos días también restringieron el tráfico en varias carreteras secundarias del interior por la presencia de hielo y nieve y dejaron incomunicadas a varias aldeas, como en núcleos de Pedrafita o Manzaneda donde las máquinas quitanieves trabajan para normalizar la situación.

MeteoGalicia desactivará hoy las alertas y descarta esta semana temporales tan intensos como los de los últimos días. En la jornada de hoy las intensas lluvias darán una tregua y Galicia quedará bajo la influencia anticiclónica que, sin embargo, traerá una bajada de las temperaturas.

El termómetro descenderá hasta cinco grados con mínimas de cinco grados en la ciudad de A Coruña; tres en Ferrol y Pontevedra; dos en Santiago y Vigo; y en Lugo y Ourense el mercurio podrá marcar los cero grados o incluso valores negativos en algunas localidades de la montaña. Este desplome de los termómetros, según explica la meteoróloga María Souto, dejará heladas nocturnas, si bien por el día no se apreciará esa sensación de frío porque el viento será menos intenso.

Los cielos solo estarán hoy despejados porque mañana una nueva borrasca obligará a coger otra vez los paraguas para resguardarse de los fuertes chubascos que caerán de forma generalizada en toda la geografía gallega por la tarde. Aún así, Souto aclara que no está previsto decretar ningún tipo de alerta por acumulación de agua debido a que el día anterior no llovió, a diferencia de la semana pasada que hubo precipitaciones varios días seguidos.

La inestabilidad continuará toda la semana, aunque serán "chubascos intermitentes" y Galicia se moverá en una situación intermedia entre el anticiclón de las Azores y las borrascas atlánticas. La cota de nieve caerá hasta los 600 metros pero al no registrarse precipitaciones continuadas no se espera -señala Souto- complicaciones por acumulación de nieve. "Vuelve la normalidad del mes de febrero con inestabilidad y tiempo cambiante pero sin fuertes temporales más propios de enero", añade.