Las carreteras gallegas estrenarán tres radares de tramo este año, dos en vías convencionales, tras el mejor año en cifras relativas a siniestralidad, ha anunciado hoy la coordinadora de la Dirección General de Tráfico en Galicia (DGT), Victoria Gómez Dobarro.

El delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, ha presidido hoy la Comisión Autonómica de Tráfico y Seguridad Vial que, entre otros asuntos, ha analizado el informe de siniestralidad en las carreteras de Galicia durante el año 2015.

Villanueva ha recordado los "datos positivos" avanzados el pasado 4 de enero, cuando se detalló que el número de víctimas mortales se había reducido desde 110 hasta 91 y los accidentes con víctimas habían pasado de 101 a 80.

La reducción ha sido notable con respecto al año 2000, con 380 víctimas, y ahora el objetivo es "que estos datos mejoren en 2016", para lo que son fundamentales los efectivos de Tráfico y "los conductores", ha abundado el delegado el Gobienro.

Según sus datos, "la mayor parte de accidentes, 88 por ciento, se producen en vías convencionales, con 81 víctimas en estas carreteras frente a diez en autopistas y ninguna en autovías".

Por su parte, Gómez Dobarro ha desvelado que durante el año entrará en funcionamiento "tres nuevos radares de tramo", uno de ellos en la AP-9 en la provincia de Pontevedra, en una zona limitada a cien kilómetros por hora.

Los otros dos serán "los primeros en vías convencionales en Galicia", uno en la carretera N-550 a la altura de Santiago de Compostela, limitado a ochenta kilómetros por hora, y el otro en Ourense, en la N-525, limitado a setenta.

"Se han elegido porque se han detectado excesos de velocidad relacionados con accidentes", ha apuntado Gómez Dobarro ante los medios de comunicación.

Preocupa en especial el repunte en los accidentes vinculados al uso de motocicletas, que se deben, según Villanueva, a las "mejores condiciones meteorológicas" registradas en 2015, y también los "atropellos".

Por ello, ha incidido en la importancia de concienciar a las personas de edad avanzada en la utilización del chaleco reflectante, pues solo en lo que va de año ya han fallecido cuatro personas atropelladas.

Respecto a las incidencias vinculadas a despistes de ancianos que entran en autovías y autopistas en sentido contrario "se van a reforzar las medidas de seguridad para lograr una mayor señalización", aunque es importante que quienes "vean que no pueden conducir, no conduzcan".