Gobierno y comunidades autónomas que participaron ayer en la Conferencia Sectorial de Agricultura aprobaron un plan de controles alimentarios que prevé para este año un total de 5.800 inspecciones, un 6% más que el año anterior.

En declaraciones a los periodistas tras finalizar el encuentro, el secretario general de Agricultura y Alimentación, Carlos Cabanas, aclaró que estos controles se realizarán, sobre todo, en la fase de producción y transformación.

Este plan, según explicó, está basado en los controles que hacen las comunidades, que se han sumado para presentar en Bruselas un documento como Estado miembro.

El Ministerio de Agricultura detalló en un comunicado que por sectores destacan aquellos cuyas producciones tienen más relevancia, como los vinos, los derivados cárnicos, los aceites vegetales comestibles y los productos lácteos. Siguiendo las recomendaciones de la Comisión Europea, los Estados miembros "están más comprometidos, si cabe, con la seguridad de la calidad de las producciones; y para ello se deben reforzar los controles de esta calidad alimentaria, tan necesaria para mantener el reconocimiento de los productos españoles en los mercados internacionales".

La reunión también ha servido para aprobar el Plan Nacional de los controles de sanidad animal, vegetal y de bienestar animal. En la Conferencia Sectorial se ha abordado, además, el reparto de fondos para las comunidades para los Programas de Desarrollo Rural y de promoción de frutas y hortalizas en los colegios, entre otros.