Febrero fue un mes negro en las carreteras gallegas. Hasta un total de 15 personas fallecieron en accidentes de tráfico el mes pasado, un balance que casi cuadruplica el registrado en febrero del año pasado, con un total de cuatro víctimas mortales. Estos datos contrastan con los de enero, que con tres muertos se convirtió en uno de los meses con menos víctimas desde que hay registros en el Centro de Gestión de Tráfico del Noroeste.

Por provincias, A Coruña concentró el mayor número de fallecidos en siniestros viarios (7), seguida de Lugo (5) y Pontevedra (3). En el extremo opuesto está Ourense, la única provincia gallega que al igual que hace un año no registró víctima mortal alguna en sus carreteras.

Por tipología de accidentes, cinco se debieron a colisiones y cuatro fueron atropellos. De los 15 fallecidos en febrero, casi la mitad superaban los 65 años. En el conjunto de Galicia, en lo que va de año el número de fallecidos se incrementó casi un 40% al pasar de los 13 registrados en enero y febrero del año pasado a los 18 en lo que va de 2016. A Coruña fue la provincia peor parada, con ocho víctimas mortales (+33%). En Lugo se pasó de ningún fallecido en 2015 a siete este año. En Pontevedra, el número de muertos bajó un 57% y en Ourense no se registró ninguna víctima en los meses de enero y febrero.