La Dirección General de Tráfico (DGT) montó en la madrugada del sábado un operativo especial en las vías de acceso y salida a la localidad coruñesa de Carballo debido a la elevada accidentalidad en la comarca de Bergantiños en febrero, con cuatro fallecidos en la primera mitad del mes, tres de ellos en Carballo y uno en Coristanco. Unos 35 efectivos de los destacamentos de Tráfico en A Coruña, Santiago, Corcubión y del subsector y del sector de Tráfico con base en A Coruña formaron parte del dispositivo orientado masivo -operativos especiales en distintas comarcas en los que se presume el consumo de alcohol y drogas para garantizar la seguridad vial- con el apoyo de vehículos camuflados y radares. Repartidos por siete puntos de la zona, incluidas las pistas sin denominación, los agentes realizaron controles de alcohol y drogas, velocidad, elementos de seguridad -cinturón, casco y sistemas de retención infantil- además de comprobar si el vehículo tenía la ITV en regla y los neumáticos en buen estado.

De las 430 conductores a los que se les hizo la prueba de alcoholemia, 33 de ellos dieron positivo al superar la tasa de 0,6 mg/l. Uno de los infractores iba camino de un curso de sensibilización para recuperar los puntos del carné porque solo le quedaba uno, pero al dar positivo por alcoholemia se le retiraron seis créditos y se quedó sin ninguno. También se realizaron siete narcotest entre los que se detectó un positivo por canabis y se denunciaron a otros 20 automovilistas por infracciones a la ley de seguridad vial.