Los juzgados gallegos son los quintos más saturados de España y este aspecto negativo también se traslada a los órganos judiciales provinciales. Los de Ourense y Pontevedra se sitúan por debajo de la media nacional, pero son los de A Coruña y Lugo los que se colocan entre los seis más colapsados. Los primeros ocupan el cuarto puesto -bajan una posición con respecto al año anterior- y los segundos, el sexto -bajan dos-.

El caso de A Coruña es destacable ya que pese a que es de los más saturados, también es de los que tienen una tasa de litigiosidad (número de pleitos registrados por cada 1.000 habitantes) por debajo de la media estatal. Los juzgados coruñeses reciben 140 casos por cada 1.000 habitantes, frente a los 176 de la media nacional o los 162 de la autonómica.

La tasa de pendencia (número de asuntos que hay pendientes frente a los que han sido resueltos) también es alta en los juzgados de las provincias de A Coruña y Lugo. Ambas llegan al 0,37 y se sitúan en la cuarta y quinta posición a nivel nacional. Es decir, de 100 casos resueltos, 37 quedaron pendientes. Solo les superan los de Castellón, Toledo y Cuenca.