El candidato del PSdeG a batirse con Feijóo en las próximas elecciones autonómicas será elegido en primarias, pero como por el momento solo han surgido descartes, pero no nombres con opciones, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, propone que el poder institucional del PSOE gallego, es decir regidores y presidentes de diputaciones, busquen y consensúen un candidato que luego habría de recibir el aval de las bases. Con este propósito, inició esta semana una ronda de contactos con dirigentes del PSdeG. La agenda de ayer incluyó una entrevista con la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, un breve encuentro en A Coruña, antes de dar una conferencia ante empresarios, con la responsable del PSOE local, Mar Barcón.

Caballero ha dado un paso al frente después de que arreciaran las críticas de "parálisis", tanto públicas como internas, hacia la gestora creada tras la salida de José Ramón Gómez Besteiro como secretario xeral del PSdeG tras las últimas imputaciones por seis nuevos delitos de corrupción en el marco de la operación Pulpo. Dirigentes socialistas cuestionan que el partido está en punto muerto, pero además temen que la gestora integrada por "desconocidos" se está moviendo para colocar a sus candidatos, que podrían ser el exdiputado autonómico Xaquín Fernández Leiceaga para candidato a la Xunta y Pilar Cancela, precisamente la presidenta de la gestora, para futura secretaria xeral del PSdeG.

Ayer, tras su reunión con la alcaldesa de Lugo, quiso dejar claro: "No estoy en cuestiones organizativas del partido, y además ni me importan". Caballero justificó que ya está muy atareado con sus responsabilidades en Vigo y como presidente de la Federación Española de Municipios e Provincias (FEMP). Tampoco se trata de "ninguna cuestión de búsqueda de poder". Y de hecho, descartó de plano a la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, como potencial cabeza de cartel en las elecciones autonómicas. "No será", declaró tajante.

El PSOE de Vigo insiste en que no pretende colocar a su candidato a la Xunta y Caballero remarcó ayer que su único objetivo es "arrimar el hombro para relanzar" el partido e insistió en que hay que aprovechar "el gran músculo municipal del PSdeG".

Los socialistas vigueses defienden que, tras la dimisión de Besteiro, hay que escuchar la voz y tener en muy cuenta la opinión de sus cargos públicos, alcaldes y presidentes de las diputaciones. El PSdeG está al frente de dos de las ciudades de Galicia (Vigo y Lugo) y de tres diputaciones (A Coruña, Pontevedra y Lugo). Por ello, Caballero ha iniciado una ronda de contactos con los dirigentes que sustentan el poder institucional del PSdeG para entre "todos" dar una salida a la crisis interna y lanzar el nombre de un candidato con opciones de devolver a los socialistas a San Caetano. "La opción real que va a gobernar Galicia va a salir del Partido Socialista, frente a un Feijóo que se presenta obligado, sin ninguna ilusión porque está aburrido en Galicia", afirmó ayer.

Por su parte, en una entrevista en Telecinco, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, defendió cómo la gestora del PSdeG está encauzando la situación tras la crisis abierta por la salida de Besteiro y defendió que ahora la prioridad del PSOE es ver si en Madrid "logra un gobierno en estas semanas, y luego cuando llegue ese río, ya cruzaremos el puente", en alusión a la elección del candidato a la Xunta.

Sánchez reiteró que el candidato socialista a la Xunta será elegido en primarias por los militantes del PSdeG, pero evitó pronunciarse sobre nombres como el de la presidenta de la Diputación de Pontevedra. Consideró además adecuada la reciente dimisión de Besteiro. "Respondimos adecuadamente al caso", sentenció el líder del PSOE.