De los más de 28 millones recaudados por los ayuntamientos gallegos en concepto del BICE en 2014, los pequeños y medianos concellos son los que más ingresan por este concepto: el 60% de todo los que se ingresa estas infraestructuras en la comunidad. Según los últimos datos del Ministerio de Hacienda pero que no detallan qué partidas corresponden a presas, saltos de agua y embalses; autopistas, carreteras y túneles de peaje o puertos y aeropuertos, los municipios de la comunidad con menos de 5.000 vecinos -un total de 200- recaudaron por los bienes de características especiales más de 7,7 millones el ejercicio pasado (el 27% del total).

Son sin embargo los concellos de entre 5.000 y 20.000 vecinos, los que más ingresaron en sus arcas por este tributo: 9,7 millones, lo que supone casi el 35% del conjunto de la comunidad. Ingresos similares obtuvieron los municipios gallegos con entre 20.000 y 50.000 vecinos y de más de 100.000, con unos 4,2 millones de euros en ambos casos. Finalmente, este gravamen aportó a los ayuntamientos con una población de entre 50.000 y 100.000 habitantes casi 2,2 millones.

Entre los municipios gallegos que más recaudaron en 2014 por el IBI sobre todos los bienes de características especiales destaca As Pontes, por su central térmica, con más de 4,4 millones de euros, seguido de A Coruña con más de 2,3 millones y casi a la par, Arteixo, con casi 2,2 millones Los siguientes en la lista son las ciudades de Vigo (1,87 millones), Ferrol (1,24 millones) y Santiago (más de 974.000 euros). Con poco más de 5.000 vecinos, Cerceda ocupa el séptimo puesto del ranking autonómico, con unos ingresos por estos bienes de más de 950.000 euros. Y con apenas 700 habitantes, el concello ourensano de Vilariño de Conso está en el octavo puesto en recaudación por este IBI especial: más de 822.000 euros. Les siguen en la lista Mugardos ( más de 660.000 euros), Muras (591.500) y Culleredo (576.800).