Los técnicos de Hacienda cifran en más de 367.000 las viviendas que en España se ceden de forma gratuita o a bajo precio, normalmente a familiares. En general, según apuntan desde Gestha, estos inmuebles no generan fraude porque el propietario aplica en el IRPF un porcentaje del valor catastral como renta imputada.

El colectivo de técnicos de Hacienda clasifica a los propietarios que alquilan viviendas en dos perfiles: el grupo de caseros jubilados que ya no necesitan su segunda vivienda y la alquilan para complementar la pensión y el grupo de familias que durante el boom inmobiliario compraron una nueva casa y arriendan la antigua para ayudar al pago de la nueva hipoteca.

A pesar de que aún las cifras de alquileres sumergidos son altas, Gestha destaca que se han reducido más de doce puntos desde 2007, cuando los alquileres fraudulentos alcanzaban el 54,03%.

Para los técnicos de Hacienda, con un plan eficaz de lucha contra el fraude se podrían reducir hasta en diez puntos porcentuales las bolsas de fraude y la economía sumergida en España, situándose en niveles similares a los países de la Unión Europea y llegando a recaudar unos 38.500 millones de euros adicionales al año.