El de 2013 fue el primer año del segundo periodo de compromiso del Protocolo de Kioto que va hasta 2020. "Aunque Galicia no contrajo expresamente ningún acuerdo vinculante en relación con sus emisiones de gases de efecto invernadero, sí que contribuye con el objetivo definido por la Unión Europea de reducir sus emisiones en un 20% con respecto a los niveles del año 1990", asegura la Consellería de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio. Si la comunidad aspirase a adaptarse a ese techo marcado por las autoridades comunitarias, las emisiones deberían bajar un 15,8% respecto a los niveles de 2014. El equivalente a lo que contamina toda la agricultura y el sector del metal.

Galicia es la cuarta comunidad con más emisiones, un 8,2% del total del país, por detrás de Andalucía, Cataluña y Castilla y León. Casi el 80% de los gases vienen del procesado de la energía: el 37% de las empresas que producen energía, el 19,6% del transporte y un 12,4% del sector residencial y comercios.