Xaquín Fernández Leiceaga restó ayer importancia a la suma del exministro de Justicia Francisco Caamaño a la lista de respaldos públicos de su contrincante en las primarias socialistas y reivindicó que la decisión está en manos de los afiliados. "Antes, el partido tenía otra forma de elegir a los candidatos, pero hoy, felizmente, tenemos un sistema de primarias que le da a todos los militantes la misma fuerza", declaró a los medios en Santiago después del acto de su contrincante.

Frente a Méndez Romeu, quiso diferenciar su campaña, que busca acercarse "directamente" a las bases del partido "sin intermediarios, sin tutelas, sin ningún tipo de padrinazgo", si bien él ha contado con el apoyo del besteirismo y de la gestora que preside Pilar Cancela.

También respondió a las críticas de Caamaño a su equipo y apoyos, a quienes culpó de llevar el partido a la situación actual y de dividirlo. "Muchos de ellos son los que tuvo él cuando estaba dedicado a la política", replicó antes de asegurar que pretende "huir" de todo lo que no sea el aval directo de la militancia. El candidato recibió ayer el apoyo de la plataforma En Positivo-Novo Proxecto Socialista Galego, que lideran cargos como Martín Seco (Arteixo), Nicolás González Casares (Lalín) e Iván Vaqueiro (O Porriño) y otros militantes como el coruñés Pablo Arangüena.