Un candidato consensuado, pero igualmente con primarias. Esta es la fórmula que defendió ayer el alcalde de Santiago, Martiño Noriega (Compostela Aberta), para designar al cabeza de cartel de En Marea para las autonómicas, después de que su homólogo de Ferrol, Jorge Suárez, propusiese saltarse la consulta a las bases para evitar la confrontación interna.

La idea original de la alianza pasaba por buscar un rostro independiente que suscitase aprobación por las direcciones. Incluso llegaron a tantear al juez Luis Villares, como publicó este diario, si bien esta opción se ha desinflado ante el bajón electoral y el ruido interno generado.

Una vez elegido se sometería igualmente a primarias, aunque acudiría a ellas con el aval de las direcciones. En principio, se descarta un duelo entre pesos pesados.

El regidor compostelano insitió ayer en que "lo ideal es que sea una persona de consenso" y, por ello, aseguró que será elegido "colectivamente" el nombre, que se conocerá en "próximas semanas". En cuanto al perfil a elegir, apostó por personas "trasversales" para que los gallegos se sientan "identificados" con En Marea y también los integrantes de la coalición se sientan representados con los candidatos.

Noriega también lamentó el rechazo de la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, a confluir en una candidatura en la que esté Podemos. "Lamento esto, porque es cierto que el BNG no sé si tendrá representación en el Parlamento y eso sabemos que puede ser una complicación para la posibilidad de cambio", ha asegurado.

Por otra parte, Mareas en Común, las fuerzas municipalistas que ha capitaneado Marea Atlántica, mostraron ayer su predilección por una consulta sobre listas abiertas para configurar las candidaturas autonómicas, separando la elección del cabeza de cartel.