El expresidente de la Diputación de Pontevedra Rafael Louzán calificó ayer de "persecución política" la petición de un año de cárcel por parte de la Fiscalía por el caso del supuesto sobreprecio que el diputado provincial Severino Reguera pagaba por el alquiler de varios locales comerciales propiedad de Louzán para que este favoreciese su carrera política.

El exlíder del PP de Pontevedra se emplazó a la próxima semana, cuando sus abogados rebatan la petición de la Fiscalía, y anunció que responderá de forma "contundente" a las acusaciones. Así lo indicó a Europa Press al término de un acto de la Federación Galega de Fútbol (FGF), entidad que preside, en Santiago.

El fiscal de delitos económicos de la Fiscalía de Pontevedra, Augusto Santaló, solicitó este fin de semana al juzgado de instrucción número 2 de Cambados la apertura de juicio oral contra Louzán como presunto autor de un delito de cohecho pasivo. El expresidente de la institución provincial está acusado de percibir sobreprecios en el alquiler de varios bajos comerciales en Vigo con cl objetivo de favorecer la carrera política del edil de Pazós de Borbén (Pontevedra) Severino Reguera, que también era diputado provincial.

"Esto es una cuestión de persecución política y se irá comprobando con el tiempo de que no hay ningún dato ni documentación que lo acredite", aseguró Louzán, al tiempo que añadió que "todo son una serie de conjeturas que hace el fiscal. "Y de conjeturas no se puede vivir", sentenció.