La temporada de riesgo de incendios, que se extiende hasta el 30 de septiembre, contará por cuarto año consecutivo con la colaboración de la Unidad de Caballería de la Policía Nacional para las labores de vigilancia.

Entre los objetivos principales de esta unidad, formada por 15 agentes y doce caballos, se encuentra la patrulla proactiva y la actuación reactiva, fundamental para la prevención en coordinación con otros dispositivos y que está diseñada en función de la experiencia de precedentes próximos. Así lo explicó ayer el delegado del Gobierno, Santiago Villanueva, en la presentación de este operativo en Santiago.

La unidad tiene como función la de prevenir la comisión de incendios en la demarcación asignada a la Policía Nacional en Galicia para las funciones derivadas de ese operativo.