La Asociación de Talleres de Reparación de Vehículos de A Coruña (Atreve) tiene identificados casi un centenar de establecimientos en las comarcas de A Coruña y Ferrol que están ofreciendo sus servicios de manera ilegal. Francisco Vales, que acaba de acceder a la presidencia de esta asociación, denuncia que muchos de estos negocios están ampliando sus actividades para las que no tienen licencia.

"Tenemos detectados más de 90 puntos en las comarcas de A Coruña y Ferrol", asegura.

Una parte de ellos son lavados y engrases que también realizan trabajos de mecánica rápida (cambio de aceite o cambio de neumáticos).

Además de los establecimientos ilegales, también tienen identificados en la ciudad de A Coruña "cuatro o cinco sitios que están trabajando a puerta cerrada". Es decir, sin ningún tipo de permiso ni de licencia, sin estar dados de alta en el Ministerio de Industria y sin pagar los impuestos pertinentes.

La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) cuantificó a principios de año en 14,8 millones el impacto de estos negocios clandestinos en la comunidad.

"Hay mucha gente que no tiene la documentación en regla de sus locales. Y otra que está realizando actividades para las que no están dados de alta", confirma Vales. "Por ejemplo, un establecimiento de lavado y engrase no puede hacer una mecánica rápida si no tiene dado de alta el negocio en Industria como taller mecánico", insiste.

El presidente de la Asociación de Talleres de Reparación de Vehículos de A Coruña cree que esta proliferación de negocios de reparación clandestinos -fuentes del sector aseguran que se han multiplicado por diez durante la crisis- se debe a que es muy complicado conseguir un licencia para abrir un taller en la ciudad.

"En A Coruña, es muy difícil que la administración pública te conceda una licencia para dar de alta un taller de mecánica. Y de chapa ya es imposible por el daño al medioambiente, por los barnices y disolventes que se utilizan. Te obligan a ir a un polígono industrial, pero ahí tienes el problema de que los clientes no quieren ir porque les queda lejos. Por eso trabajan de forma clandestina en la ciudad", explica el presidente de los talleres coruñeses quien ratifica que para un negocio de lavado y engrase la licencia "la dan sin problema". Por todo ello considera que "es una competencia desleal que hace mucho daño".

Además de los talleres ilegales, otro de los problemas al que se enfrenta el sector son las compañías de seguros. Por una parte, Vales se queja de que "las aseguradoras están comercializando un tipo de póliza en la cual obligan al cliente a llevar a reparar su coche en caso de un siniestro a un taller concertado". Y eso va en contra de la libre competencia, aduce. "El cliente es el dueño de su coche, no la compañía de seguros", esgrime. También hay talleres que acuerdan con las aseguradoras que les envíen los coches para reparar. "Es un error aliarse con una compañía de seguro. Pones unas instalaciones y pones un personal a disposición de esa compañía porque te dice que te va a mandar carga de trabajo. Te cargas de mano de obra y en el momento en el que decide dejar de mandarte trabajo tienes un problema", reconoce. El presidente de Atreve también se queja de que las aseguradoras "imponen" un precio de mano de obra al taller de calle y otro al taller del concesionario. Y eso también dificulta la supervivencia de los pequeños negocios de reparaciones.