La portavoz de En Marea en el Congreso, Alexandra Fernández, y el veterano político nacionalista, Xosé Manuel Beiras, ambos de Anova-Irmandade Nacionalista, han celebrado que la coalición haya acordado pedir grupo parlamentario propio en el Congreso de los Diputados y "aprenda" de la experiencia de la legislatura anterior.

"Me parece una noticia muy positiva", ha manifestado, en declaraciones a los medios, el portavoz nacional de Anova, antes de participar en el acto del Día da Patria, en el compostelano parque de Galeras, en el que también se dieron cita los diputados Alexandra Fernández y Miguel Anxo Fernán Vello, de En Marea.

La mesa coordinadora de la coalición que conforman Podemos Galicia, Esquerda Unida y Anova acordaron este domingo solicitar este martes la petición de grupo parlamentario propio, después de que en la anterior legislatura hubiesen renunciado a esta cuestión ante el temor de acabar en el Grupo Mixto. En este caso, han pedido garantías de que se podrá solicitar una reconsideración si la Mesa deniega el grupo parlamentario y, en ese caso, se negociará con Unidos Podemos la conformación de un grupo confederal.

"Claro que cambia, muda, y efectivamente, de eso se trataba, de cambiarlo", ha expresado Xosé Manuel Beiras, quien ha indicado que "ya que no se había conseguido" que se facultase a la asamblea de En Marea del 15 de marzo para crear un partido instrumental, "por lo menos ahora sí" se va a pedir grupo propio.

Con todo, ha considerado una "lástima" que "no se hubiese aceptado en su momento el partido instrumental y con el cual se habría blindado esta cuestión".

"Estaría blindado"

En este sentido, ha recordado los argumentos de que no la clave era que cambiase la correlación de fuerzas en la Mesa y que "no iba a haber mayor problema", al respecto de lo que sentenció que fue "el cuento de la lechera". "Si se hubiese aceptado, estaría blindado", ha juzgado el veterano político.

Por su parte, Alexandra Fernández ha reconocido que "se aprendió de la experiencia previa" y se ha mostrado "muy contenta" de que, en esta ocasión, si se vaya a registrar la petición de grupo parlamentario propio, como así recoge el documento político de la coalición.

"Como En Marea defendemos que este espacio político representa el sujeto político gallego y que podamos tener en el Congreso todas las herramientas para llevar todas las demandas gallegas a todos los niveles. Vamos a llegar hasta el último trámite en la defensa del grupo parlamentario", ha enfatizado Alexandra Fernández. De hecho, el propio Xosé Manuel Beiras apuntó que se elevaría al Tribunal Constitucional en el caso de que se deniegue por parte de la Mesa.

Para la portavoz de En Marea, rechazar la constitución de un grupo propio por parte de la Mesa para esta coalición sería "absolutamente antidemocrático", puesto que, "como parece", otras fuerzas "que no cumplen las condiciones" sí lo van a tener, en referencia a la antigua Corvengència.

"Y nosotros sí cumplimos", ha dicho, apelando a que consiguieron cinco diputados y se superó el 15 por ciento en todas las circunscripciones gallegas. "Lo que evidencia es la imparcialidad de la Mesa en la aplicación del reglamento, que no respeta la voluntad de pluralidad", ha considerado.

En todo caso, y conscientes de la posibilidad de que se deniegue, Alexandra Fernández ha apuntado que se "empezarían a abrir las negociaciones con Podemos y cuáles son las condiciones" de un grupo confederal. "Somos también conscientes de que partimos de una situación de aprendizaje de la anterior legislatura, de la propia mesa de coordinación, del grupo confederal de diferentes fuerzas", ha apostillado.

Contactos

Los socios de En Marea mantuvieron contactos en los últimos días con la idea de pedir grupo parlamentario propio en el Congreso de los Diputados, tras haber logrado cinco diputados y superar el 15 por ciento en las cuatro circunscripciones electorales por las que se presentó el pasado 26 de diciembre.

Fuentes de las tres formaciones políticas consultadas por Europa Press explicaron que se mantuvieron conversaciones con la presidenta de la Cámara, Ana Pastor, y que mostró su voluntad de facilitar que, una vez que se reúna la Mesa el próximo miércoles día 27 de julio, y dando por hecho que se denegará el grupo parlamentario, se les permita a los cinco diputados reubicarse en el grupo confederal de Unidos Podemos.

En la legislatura pasada, En Marea renunció a pedir grupo parlamentario, como también lo hizo así En Comú, debido a la falta de garantías de no acabar en el Mixto, frente a lo que hicieron los integrantes de la confluencia valenciana, que repitieron en esta ocasión la misma petición.

Entonces, se justificó la actuación para evitar la ruptura de los socios, al respecto de lo que el portavoz nacional de Anova, Xosé Manuel Beiras, aseguró, pasado el trámite, que su formación política había cedido ante el riesgo de que cada diputado acabase en un grupo distinto, como en el caso de Compromís.

Si ya entonces se priorizó la unidad a pocos meses de unas elecciones autonómicas y en medio del debate de como concurrir, ahora los socios de En Marea se mantienen en esta misma línea, cuando apenas faltan unos meses para los comicios gallegos, aunque existen voces en Anova que serían partidarias de registrar con o sin garantías la petición de grupo.

Permite ir al constitucional y visibilización

La solicitud de constituirse como En Marea en el Congreso permite, además, el recurso ante el Tribunal Constitucional, situación que habían comprometido ya en las elecciones anteriores pero que se inviabilizó al no llegar a formalizar la petición.

Finalmente, y si como se espera el grupo propio es rechazado por la Mesa del Congreso, con mayoría de PP y Ciudadanos, los socios todavía tienen que cerrar las condiciones de la conformación del grupo confederal, como las intervenciones y el protagonismo de En Marea, que querrá visibilizarse como alternativa para apoyar la candidatura de confluencia en las gallegas de este año.