Xosé Manuel Beiras no se va, solo cambia de papel. El histórico dirigente, líder de Anova, definió ayer el que será su papel durante la campaña electoral que arrancará la medianoche del 9 de septiembre. "Voy a dejarme la piel en lo posible", declaró en un acto en Pontevedra con motivo del Día de Galicia Mártir, que recuerda el 80º aniversario del fusilamiento del galleguista Alexandre Bóveda, asesinado por el Ejército tras el golpe de Estado de 1936.

A sus 80 años, Beiras explicó que no podrá "hacer disparates" con su agenda, pero que pateará en la medida de lo posible Galicia para apoyar al magistrado Luis Villares, que será el candidato a presidir la Xunta de En Marea. Aun así, descartó que su negativa a participar en las primarias responda a un paso al lado. "Nunca estoy en segunda línea", indicó. Impulsor de la confluencia de las fuerzas de izquierda desde 2012, Beiras ha sido siempre defensor del derecho a la autodeterminación, aunque ha ido suavizando su postura en los últimos años.

Autodeterminación

El candidato al que avalará no luchará por una consulta soberanista al estilo de la impulsada en Cataluña, si bien reiteró ayer que considera que Galicia es una "nación".

Con su discurso quiso alejarse del BNG, explicando que para En Marea "autodeterminación es el reto del buen gobierno y utilizar las instituciones en clave de país, justicia social y democrática, algo que no se ha producido por las políticas antisociales del gobierno de Núñez Feijóo", informa Efe.

También se desmarcó de la promesa del Bloque de impulsar una reforma del Estatuto de Autonomía. "Nosotros no vamos a prometer lo imposible", alegó en el acto de Pontevedra, argumentando que "de aquí a 50 días no hay tiempo" para acometerla.