Un total de 104 personas fueron fusiladas en el otoño de 1936 y enterradas en el Alto de La Pedraja (Burgos). Una suerte de coincidencias provocó que cuarenta y cinco de sus cerebros se conservasen dentro de...

Siga leyendo la noticia en Orbyt, o suscríbase a La Opinión de A Coruña y tenga acceso completo a todas nuestras noticias sin límites.