Agentes de la Agencia Tributaria realizaron ayer varios registros en propiedades del exalcalde de Ribadumia José Ramón Nené Barral en el marco de una investigación por blanqueo y contrabando, dirigida por la juez Pilar de Lara.

Los registros se concentraron en las viviendas que Barral posee en As Sinas (Vilanova de Arousa) y Lantaño (Portas), así como en una casa propiedad de una hija en Ribadumia. Pero no fueron los únicos puntos donde se llevaron a cabo las pesquisas ya que también se extendieron a Extremadura y a un despacho de abogados de A Coruña, relacionado con Barral por haber sido el que llevó el proceso en el que el exregidor consiguió evitar la cárcel.

En ninguno de los registros se practicaron detenciones, aunque fuentes próximas a la familia de Barral reconocen que tuvo que responder a una serie de preguntas que les plantearon los agentes. Según algunas fuentes del bufete de A Coruña, los agentes se llevaron documentación relativa a ese proceso en el que el exregidor alcanzó un pacto con las autoridades judiciales para evitar su ingreso en prisión, pese a que se confirmó una condena de dos delitos contra la Hacienda Pública por defraudar 338.493 euros en la declaración de la renta de los años 2006 y 2007.

Ese dinero provendría supuestamente de los negocios que el exalcalde de Ribadumia poseía en China y Chile, vinculados a explotaciones acuícolas y parques eólicos. y cuyos ingresos se gestionaban a través de una sociedad radicada en las Islas Vírgenes.

Responsabilidad

A cambio de reconocer que no abonó al fisco 135.000 euros el primer año y más de 202.000 el segundo, Barral aceptó el pasado mes de mayo una condena de seis meses de prisión por cada uno de los dos delitos fiscales cometidos.

Al asumir toda la responsabilidad sobre los negocios y los beneficios que generaron y que se ocultaron a Hacienda, Barral también consiguió que se retirase la acusación contra sus hijas, que inicialmente, habían sido imputadas por los mismos delitos, al figurar como socias de la compañía radicada en las Islas Vírgenes.