El Ministerio de Fomento ha vetado que el Congreso debata la proposición de ley aprobada por unanimidad por el Parlamento gallego para pedir la transferencia de la AP-9, cuya titularidad reclamó el propio presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a su compañera de partido, la entonces ministra Ana Pastor.

Conforme a la legislación, las proposiciones de ley que se registran en la Cámara baja se someten a consideración del Ejecutivo para ser debatidas, ya que el Gobierno cuenta con capacidad de mostrar su disconformidad hacia aquellas que, a su entender, puedan tener efectos negativos sobre los presupuestos en curso o previstos, ya sea porque merman los ingresos o porque aumentan los gastos.

El pasado viernes, Moncloa comunicó al Congreso su rechazo a la tramitación de diez iniciativas legislativas de la oposición y de Parlamentos autonómicos, entre ellas la de la transferencia de la AP-9. El criterio del Gobierno que dirige en funciones Mariano Rajoy es que la aprobación de esta propuesta, que ha contado con el respaldo de toda la cámara gallega en diversas ocasiones, supondría un "aumento de los créditos presupuestarios", por lo que no está conforme con su tramitación, como así figura en el documento enviado al Congreso con fecha del 14 de octubre.