Estado de los frenos, los neumáticos, los faros, la suspensión y la dirección, los gases, la carga o la documentación del vehículo. Tráfico puso en marcha la semana pasada una campaña para controlar las deficiencias técnicas de camiones, furgonetas y autobuses que circulan por las carreteras de la comunidad. El dispositivo discurrió en paralelo a otro promovido por la organización internacional de Policías de Tráfico (Tispol), al que se suma la DGT a través de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Esta última campaña centrada en el transporte de mercancías y de viajeros también vigilaba las infracciones de velocidad, alcohol o drogas, no utilización del cinturón de seguridad o uso del móvil al volante. En total, las patrullas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Galicia controlados la semana pasada a un total de 2.480 camiones, furgonetas y autobuses, de los que un total de 249 fueron denunciados. O lo que es lo mismo, uno de cada diez vehículos inspeccionados en las carreteras gallegas por los agentes tendrán que hacer frente a la correspondiente sanción económica por fallos técnicos del vehículo, irregularidades en los tacógrafos o la documentación, exceso de velocidad o consumo de alcohol o drogas, entre otras infracciones.

Una de las campañas se prolongó durante toda la semana, con un total de 133 denunciados, lo que supone una media de 19 cada día. El dispositivo que se llevó a cabo durante cinco días se saldó con 116 denuncias, lo que significa 23 conductores sorprendidos infraganti cada día. En total, una media de 42 sanciones cada día a transportistas y conductores de autobús en las carreteras gallegas. La mayoría de los vehículos denunciados son camiones y furgonetas, con un total de 231 (casi el 93% del total en la comunidad) frente a los 18 de transporte de viajeros.

No pocos transportistas fueron sancionados por varios fallos técnicos o infracciones en materia de seguridad vial. Frente a los 249 vehículos interceptados, las denuncias interpuestas ascienden a 322.

En el operativo desarrollado por la DGT, las patrullas de Tráfico utilizaron unidades móviles de ITV, que rotarán por las carreteras de toda España para continuar con este tipo de controles. El objetivo es realizar cada año unas 12.000 inspecciones en la red viaria de todo el país.

Con los controles llevados a cabo la semana pasada, la DGT se propone mejorar las condiciones de seguridad de los vehículos industriales y evitar accidentes de tráfico. Los datos de 2015 revelan que el 9% de las furgonetas, el 4% de los camiones de más de 3.500 kilos y el 1% de los autobuses implicados en un siniestro con víctimas en carreteras interurbanas tenían la ITV caducada en el momento del accidente. La Unión Europea estima que el 6% de los siniestros viarios se deben a fallos técnicos que en muchos casos podrían evitarse con un correcto mantenimiento del vehículo.

Sanciones de hasta 500 euros

La Ley de Seguridad Vial detalla que las deficiencias en el mantenimiento de los vehículos pueden ser consideradas infracciones graves, sancionadas con 200 euros de multa, o muy graves. Por estas últimas el titular se enfrenta a una sanción de 500 euros. Además se podría inmovilizar el vehículo en el caso de deficiencias graves (frenos, neumáticos o suspensión, entre otros) hasta la reparación de las mismas y con la obligación posterior de someter el vehículo a comprobación en una estación ITV fija.

La sanción por circular con un vehículo sin haber pasado la ITV o por haber resultado desfavorable es de 200 euros y de 500 por circular cuando la inspección resultó negativa. En el año 2015, el 25% de los autobuses y el 23% de los camiones presentados a la ITV obtuvieron el resultado de desfavorable.