La vendimia que acaba de finalizar en las cinco denominaciones gallegas ha sido peculiar debido a las condiciones meteorológicas. Las lluvias primaverales y la sequía y el calor del verano ralentizaron el proceso de maduración de la uva. Por eso, todas las bodegas retrasaron la vendimia entre dos y tres semanas. Debido a estas condiciones, las previsiones apuntaban a una caída de la cosecha del 10% en el mejor de los casos y del 30% en el peor con respecto a 2015. Finalmente las cinco denominaciones (Rías Baixas, Ribeira Sacra, O Ribeiro, Valdeorras y Monterrei) recogieron 60,8 millones de kilos de uva, 2,7 menos que un año antes. El descenso es del 4,2%. La campaña de 2015 fue histórica en volumen ya que se convirtió en la tercera mejor del siglo solo superada por los casi 78 millones de kilos de 2011 y los 64 millones de 2006.

Todas las denominaciones coinciden en que pese a las lluvias de primavera, que provocaron la aparición del mildiu y ocasionaron una disminución de la producción, y las altas temperaturas del verano, la calidad de la uva sigue siendo muy buena. Los días de lluvia de principios de septiembre, justo antes del grueso de las tareas de vendimia, contribuyeron a optimizar el comportamiento de los viñedos.

►Rías Baixas, una cosecha histórica. La vendimia en esta denominación de origen se desarrolló entre el 6 de septiembre y el 14 de octubre. Más de la mitad de la producción de las cinco denominaciones corresponden a la de Rías Baixas. La cosecha fue la tercera mayor de la historia de esta denominación al superar los 33,3 millones kilos, con lo que se espera poder elaborar unos 22 millones de litros de vino. La previsión era de una merma de un 10% con respecto al año pasado por las circunstancias meteorológicas de la primavera y el verano, aunque finalmente el crecimiento fue del 4%. Por variedades de uva, la albariño volvió a representar más de un 95% de la cosecha.

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El director técnico del Órgano de Control y Certificación del Consejo Regulador, Agustín Lago, aseguró que se trata de una vendimia desarrollada con normalidad y caracterizada por un muy buen estado fitosanitario de la uva. Se ha obtenido, así, una cosecha con "unos parámetros de calidad muy elevados, un excelente equilibrio entre grado y acidez, así como unos perfiles muy aromáticos".

►Ribeira Sacra, en la media de los últimos años. El 9 de septiembre comenzó la vendimia para las 89 bodegas que elaboran vino bajo el amparo de esta denominación de origen gallega. Tras 42 días de intensa actividad se recogieron 5,5 millones de kilos, un 11,2% menos que hace un año. Sin embargo, la cosecha está en la media de los últimos ejercicios: 5,4 en 2012; 4,7 en 2013; 4,7 en 2014 y 6,2 en 2015.

Según fuentes de la denominación de origen, durante los días de vendimia las condiciones meteorológicas fueron favorables, ya que el tiempo fue seco, apenas hubo lluvias y la uva entró en las bodegas en un estado fitosanitario bueno, por lo que se prevé que la cosecha sea "muy buena".

De variedades tintas se vendimiaron 5,2 millones de kilos, la mayoría de Mencía (4,7) y de las variedades blancas se recogieron 375.900 kilos, la mayoría de Godello (273.889).

►O Ribeiro, menos cosecha de la esperada. Las previsiones que manejaba esta denominación de origen eran de una merma del 10% con respecto al año pasado. Finalmente fue del 17% ya que se recogieron 11,7 millones de kilos, frente a los 14,1 de 2016. Fuentes del consello regulador explican que esta reducción se debe a las inclemencias derivadas de las abundantes precipitaciones en primavera, durante la floración de las plantas, que provocaron la aparición de mildiu.

La denominación de origen más antigua de Galicia la conforman 107 bodegas situadas en los valles formados por los ríos Miño, Avia y Arnoia, en el noroeste de la provincia de Ourense. La D.O. Ribeiro tiene una extensión de 2.646 hectáreas. Un territorio de gran diversidad vitivinícola donde trabajan unos 5.800 viticultores.

►Valdeorras, la que más baja. Los fenómenos meteorológicos adversos y la incidencia del mildiu en las cepas mermaron un 29% la cantidad de kilos de uva que se recogieron en esta comarca. Es la mayor caída de las cinco denominaciones. Se vendimiaron 4,6 millones de kilos frente a los 6,5 de hace un año.

Además de las lluvias, el 6 de julio se produjo una gran granizada que afectó a una veintena de bodegas. En algunos casos los daños se estimaron en un 70% de la producción. Por este motivo, solicitaron a la Xunta una línea de ayudas que permita paliar la situación de los viticultores y bodegueros afectados.

A pesar de la reducción en la producción, con respecto a la "extraordinaria" campaña de 2015, la calidad de la uva seguirá siendo, un año más, "excelente", según destacó Francisco García, presidente de la D.O. Valdeorras.

La ausencia de agua durante los meses de verano provocó que la uva tardase más tiempo en madurar y este fue uno de los motivos por los que la vendimia empezó más tarde.

►Monterrei, solo 300.000 kilos menos. De las cuatro denominaciones que vendimiaron menos uvas que el año anterior, la de Monterrei fue la que menos acusó el descenso: solo 300.000 kilos menos. Pasó de 4,7 millones de kilos a 4,4. Un 6,3% menos. Pese a la caída de producción, la calidad de la uva sigue siendo buena.

La denominación de origen la conforman 25 bodegas del valle de Monterrei, que abarca los municipios de Verín, Monterrei, Vilardevós, Riós, Oimbra y Castrelo do Val. Los viñedos ocupan 531 hectáreas en las que trabajan 445 viticultores.