China ha salido al rescate del sector porcino gallego. El gran gigante asiático ha abierto sus fronteras a la carne de cerdo del exterior y con esta medida ha salvado un sector que en los últimos años, debido a la crisis, no cubría los gastos de producción. Desde finales del año pasado la situación se había agravado por el aumento de la oferta-mayor producción- y la bajada de la demanda.

"La situación está mejor ahora que a principios de año. En mayo se abrió la exportación de carne a China y eso ha provocado que el sector mejore. Esto no quiere decir que ganaremos sino que cerraremos el año en tablas, porque no hay que olvidar todo lo que perdimos en 2015", reconoce José Antonio Vidal, presidente de la Federación Galega de Porcino (Fegapor).

En los nueve primeros meses del año, las exportaciones españolas de carne de cerdo a China han alcanzado las 208.500 toneladas. Es un 130% más que las 90.300 de enero a septiembre del ejercicio pasado, y un 204% más que las 68.500 del mismo periodo de 2014.

La demanda desde el gigante asiático ha aumentado debido a la insuficiente producción local causada por una reducción en el número de reproductoras y la imposición de estrictas medidas medioambientales que obstaculizan la expansión e implantación de nuevas explotaciones. Esta situación ha provocado que el precio medio de la carne de cerdo importada desde China haya crecido un 19% respecto a 2015, lo que beneficia a los exportadores.

China es el mayor productor y consumidor de porcino del mundo. Consume y produce aproximadamente la mitad de lo que se pone en el mercado y se demanda a nivel mundial. Y España es la cuarta potencia productora (después de China, EEUU y Alemania). Dentro del marco comunitario, España es el segundo país de la UE en cuanto a producción de carne de cerdo. El 60% de la producción gallega se exporta ya sea a otras zonas de España o al extranjero.

Tras un largo proceso de negociación, que se remonta a junio de 2015, y que incluyó la visita de las autoridades chinas a varios establecimientos cárnicos españoles, las autoridades sanitarias de este país ampliaron la autorización para exportar carne de porcino, de patas y manos a nuevas empresas. La lista de industrias españolas autorizadas está compuesta, por ahora, por 26, lo que convierte a España en el país de Europa con mayor número de establecimientos autorizados, por delante de países como Alemania, Dinamarca o Francia. Gracias a China se ha podido contrarrestar el cierre del mercado ruso a la carne de cerdo procedente de la Unión Europa y se ha podido dar salida a la carne almacenada que se había guardado en congeladores a la espera de que el panorama mejorase.

Pese a estos buenos datos, José Antonio Vidal insiste en que la situación tiene aún que mejorar mucho para contrarrestar las perdidas "muy elevadas" de los últimos años. "En 2015 perdíamos 30 euros por animal y 15 euros por lechón. Esto supone que, por ejemplo, en granjas con 1.000 madres se perdía entre 6.000 y 8.000 euros por semana. No es que lo dejasen de ganar. Es que lo perdían", afirma el presidente de Fegapor. "El agua no estaba al cuello sino que ya llegaba a la nariz. Si solo contamos los últimos meses de este año la situación es mejor, pero si hacemos números juntando 2015 y 2016 las pérdidas son muy elevadas", confirma.

Galicia es una de las potencias nacionales en el sector porcino. Posee, según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, 27.949 explotaciones de cerdos, lo que supone el 31,9% del total nacional. Es, con diferencia, la comunidad con más granjas. La segunda y la tercera, Extremadura y Andalucía, cuentan con 13.648 y 12.667 respectivamente, y un 15,6% y un 14,5% de cuota de mercado. Tras el récord del número explotaciones gallegas que se alcanzó en 2012 con 30.164, a finales de 2015 la cifra se ha reducido en 2.215. Un 7,3% menos

Pese a que Galicia es la comunidad con más explotaciones, sólo es la novena que tiene más animales, lo que demuestra que el tamaño de las granjas es mucho menor que en el resto de España.

Al cierre del pasado ejercicio había en la comunidad 1.082.000 cerdos, frente a los 7,7 millones de Cataluña; los 6,9 de Aragón o los 3,6 de Castilla y León. Con respecto a 2014 se contabilizan en Galicia 49.000 cabezas menos. El 4,3% menos.

En cuanto a la producción, la comunidad sacó al mercado 75.900 toneladas durante 2015, 2.000 menos que un año antes. Es la novena comunidad con más producción de carne de cerdo.

Durante los nueve primeros meses del año, China ha importado 1,28 millones de toneladas de carne de cerdo europea, cantidad que dobla la de 2015.

El futuro, según destaca el presidente de la Federación Galega de Porcino, se presenta con clarooscuros. Por una parte, un informe de Estados Unidos afirma que China reducirá la importación de carne de cerdo durante 2017 debido a una subida de la producción local. Pero por otra deberán empezar a dar sus frutos los acuerdos comerciales que se han firmado recientemente con Colombia, México, Chile, Filipinas o Vietnam.