El Ministerio de Fomento no ampliará los plazos de concesión de la explotación de autopistas de peaje por parte de empresas privadas que vencen entre los próximos tres y cinco años (entre 2018 y 2021), que entonces pasarán a manos del Estado para, "en su momento, decidir la mejor forma de explotarlas". Así lo avanzó ayer el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, en un mensaje que afecta a Itínere, el grupo gestor de la AP-9, la autopista que vertebra Galicia de norte a sur y cuya concesión finaliza en 2048.

De la Serna sin embargo no concretó la fórmula que se estudia para gestionar las vías, bien si el Estado las explotará directamente o si volverá a sacar a concurso la concesión de su gestión a una empresa. El ministro hizo este anuncio en el pleno de control al Gobierno al ser preguntado expresamente por las autopistas de Cataluña, si bien hizo extensiva su respuesta a todas las vías en la misma coyuntura.

Una media docena autopistas culminan en los próximos años el plazo por el que en su día el Gobierno contrató con empresas su construcción y posterior explotación. Se trata de la AP-1 Burgos-Armiñón, cuya concesión vence en 2018, de la AP-7 Tarragona-Alicante y la AP-4 Sevilla-Cádiz, que concluye en 2019, y de dos tramos de la AP-7 (La Jonquera-Barcelona y Barcelona-Tarragona) y la AP-2 Zaragoza-Mediterráneo, que termina en 2021. Itínere es la compañía titular de la concesión de la AP-1 y Abertis cuenta con la del resto de las vías próximas a concluir su plazo de explotación.

Por otra parte, el Congreso rechazó ayer la propuesta de En Marea, pactada con el PSOE, de transferir a Galicia la AP-9. Los diputados de PP, Ciudadanos y Foro Asturias unieron sus 18 votos para rechazar la proposición no de ley. Por el contrario, contó con el respaldo de ERC, PNV y Compromís, lo que debería sumar 19 papeletas y hacer prosperar la iniciativa. Pese a ello, uno de estos 19 diputados se ausentó o no votó, de manera que resultó un empate. La votación se repitió hasta en tres ocasiones, con idéntico resultado, de manera que finalmente decayó la proposición no de ley.

En Unidos Podemos desconocen con certeza qué diputado no votó, pero apuntan al PSOE. Según defiende En Marea, todos los parlamentarios de su grupo emitieron su voto y "han comprobado" como ERC, PNV y Compromís también lo hicieron.

La iniciativa, cuyo texto fue consensuado con los socialistas, pedía que se levantara el veto impuesto en el Congreso a tramitar la proposición no de ley aprobada por unanimidad en el Parlamento gallego el pasado 15 de marzo en la que se instaba a transferir a la Xunta la titularidad de la AP-9, que vertebra Galicia.