Las nevadas de la semana pasada hicieron estragos en el campo gallego. Los soutos de castaños del sur de la provincia de Ourense fueron los más castigados. Cosecha tardía y nieve anticipada fueron una combinación nefasta para las plantaciones, que en cuestión de horas quedaron reducidas a una parcela de troncos ya que el peso de los copos acabó rompiendo casi todas las ramas. En algunas aldeas de Castrelo do Val, Riós y A Gudiña apenas el 50% de los castaños sobrevivió al temporal de la semana pasada. "Incluso hay plantaciones con 100 castaños, de los que solo tres no se vieron afectados", comenta el alcalde de Castrelo do Val, Vicente Gómez. Hoy mismo el regidor llevará al pleno municipal una iniciativa para demandar a la Consellería de Medio Rural ayuda técnica y económica para reparar los daños, una medida que también reclamarán desde el Concello de Riós.

Para los productores, lo más importante es que la Xunta les garantice asistencia técnica con la poda de los árboles afectados, que en muchos casos quedaron partidos en dos. "En algunos soutos, fue un auténtico desastre", lamenta un recolector de la zona de Castrelo do Val. "Si no se tratan, los castaños -advierte- acabarán muriendo por las enfermedades y no llegarán a la cosecha del próximo otoño. Y hemos invertido mucho tiempo y dinero para que de la noche a la mañana nos quedemos sin nada".

La nieve arrasa la mitad de las plantaciones de castaños en ayuntamientos de Ourense

La nieve arrasa la mitad de las plantaciones de castaños en ayuntamientos de Ourense

La recogida de la castaña ya está prácticamente finalizada. Apenas quedan frutos en los árboles o en los soutos por recoger. Pero esta cosecha se produjo con 15 días de retraso y eso provocó que todavía hoy haya ourizos y mucha hoja en los árboles. "Con ese peso en las copas de los castaños, la nieve y un poco de viento que hiciera se partieron muchas ramas", comenta José Manuel Guerra, técnico de Recursos Naturales de la Asociación A Castaña, de A Gudiña, que en la reunión prevista para el próximo día 10 el colectivo cuantificará los daños y acordará qué medidas pedirán a la Xunta para garantizar la recuperación de las plantaciones afectadas. Una de las causas que pudo haber agravado los daños, apunta Guerra, es la "dejadez en la poda", que provocó que las ramas en peor estado se vieran afectadas por el peso de la nieve. Sin embargo, tanto los alcaldes de la zona como los productores descartan que ese sea el motivo ya que la mayoría de castaños dañados habían sido podados. "No solo se vieron afectados castaños de pocos años, hay árboles centenarios que también sufrieron los daños de las nevadas", apunta el alcalde de Castrelo do Val, quien anunció que tanto su Concello como el de Riós solicitarán a la Xunta "apoyo técnico" para hacer un corte "en condiciones" y una poda "que evite la entrada de hongos por esas ramas cortadas" y también que Medio Rural abra una línea de ayudas para los productores afectados.