La actividad de transporte de Renfe en 2015 supuso un ahorro para la sociedad de 1.703 millones si se evalúa en términos económicos el impacto sobre el cambio climático, la contaminación y la tasa de accidentes que habría tenido realizar este transporte por otros medios. En el caso concreto de Galicia el ahorro de costes externos generados se ha situado en 44,3 millones.

Según informó Renfe, este supuesto además habría conducido a un aumento de las emisiones de CO2 (gas de efecto invernadero) por transporte en España de 3,5 millones de toneladas y un incremento en el consumo energético de más de un millón toneladas equivalentes de petróleo. Estos datos se recogen en el estudio anual de ahorro de costes externos, ahorro de huella de carbono y ahorro de consumo energético generado por los servicios de Renfe de acuerdo con la metodología contenida en el trabajo Costes Externos del Transporte en Europa.

Renfe resalta que la principal aportación de este estudio es "demostrar con procedimientos de medida estandarizados y científicamente aceptados que el ferrocarril español es el modo que genera menos costes externos", especialmente comparado con otros modos dependientes de los hidrocarburos.