Reducir la cantidad de residuos enviados al vertedero de Areosa del 25% actual al 10% a través del aumento de su capacidad de tratamiento es el principal objetivo que persigue la Sociedade Galega de Medio Ambiente (Sogama) con la reforma de sus instalaciones. Con la remodelación de la actual nave de reciclaje, tratamiento y elaboración de combustible donde se procesa la basura de la bolsa negra -residuos genéricos- y con la construcción de una nueva planta para la recuperación de los envases de papel, cartón y plásticos contenidos en la basura en masa, Sogama calcula aumentar en un 81% el tratamiento anual de residuos en la planta de Cerceda, al pasar de las 550.000 toneladas procesadas a la actualidad a un millón, una cifra un 30% por encima de las 750.000 toneladas que se manejaban en las previsiones iniciales.

Según su presidente, Javier Domínguez, de esta forma la empresa podrá asumir las más de 800.000 toneladas que cada año entran en el complejo procedentes de los 294 ayuntamientos gallegos adheridos a la sociedad y que abarcan hasta el 94% de la población. Al mismo tiempo, la empresa pública aspira a reciclar el 15% del total, 10 puntos más que el 5% actual.

El presidente de Sogama anunció ayer que las obras comenzarán el próximo junio y concluirán en diciembre de 2018, con el objetivo de que la nueva planta esté operativa y a pleno rendimiento en 2019. La empresa adjudicataria -la pyme ourensana Valtavia- tendrá tres meses para presentar el proyecto de construcción definitivo y la entidad calcula otros tres para que el Ayuntamiento de Cerceda conceda la licencia de obra y se puedan iniciar los trabajos al término del primer semestre del año.

El proyecto se ha retrasado seis meses debido a los tres recursos judiciales presentados por las otras cuatro aspirantes -cuatro uniones temporales de empresa (UTE) encabezadas por filiales de Acciona; Ferrovial y Copasa; FCC; y Sacyr - que fueron desestimados por el Tribunal Administrativo Central. El organismo aceptó las alegaciones de Sogama y de la compañía ganadora y concluyó que ni se vulneró la igualdad de trato en el reparto de la información ni la mesa de contratación incurrió "en una valoración irracional o arbitraria" del proyecto, por lo que el 21 de octubre se realizó la adjudicación definitiva a Valtalia. Pese al retraso Domínguez garantizó que "se van a cumplir los plazos".

El coste total de la ampliación tras la firma llega a los 275 millones de euros, más IVA, 60 millones menos que los 335 de máximo que preveía el pliego de licitación. De ellos, 29 millones se destinarán a la construcción de nuevas instalaciones y los 246 restantes para el mantenimiento durante 15 años. El presidente de Sogama anunció además que los trabajos para construir la nueva planta generarán 300 nuevos empleos y una vez en funcionamiento, 200 puestos indirectos.